Exteriores del Ministerio de Industria.
El despliegue normativo de este 2023 está dejando proyectos en 'stand by', algunos de ellos desde antes de la pandemia. En el caso de la industria farmacéutica, los dos planes estrella del Gobierno (el Perte de Salud de Vanguardia y la nueva estrategia nacional) han 'engullido' a la agenda sectorial de la industria farmacéutica, el proyecto que se planteó justo antes de la pandemia de Covid-19 para impulsar el desarrollo del sector.
Esto significa que el Gobierno va a priorizar estas dos iniciativas, más actualizadas y novedosas al ser trabajadas tras la pandemia, frente a la agenda sectorial farmacéutica, por lo que no se descarta que pase todo el 2023 para volver a atajarlo. Es decir, queda de nuevo congelada sin visos de retomarse a corto-medio plazo.
Y es que tanto el Perte de Salud de Vanguardia, concretamente la convocatoria IDI Farma, como el nuevo Plan Estratégico de Industria Farmacéutica son las grandes apuestas del Gobierno para reforzar el sector en España después de que pasase lo peor del Covid-19 y para evitar situaciones de escasez. La primera de ellas ya está preparando su segunda convocatoria, prevista para el próximo mes de mayo, a la que se pueden presentar empresas forma individual o colectiva.
Si bien, la segunda, el Plan Estratégico, todavía no tiene una fecha en el horizonte, aunque sí se prevé que arranque este mismo año. el último paso del Gobierno ha sido crear un grupo de trabajo con el sector y han anunciado una inversión de más de 8.000 millones de euros para llevarlo a cabo. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ya ha explicado que este plan supone "un impulso a las cadenas de suministro y el refuerzo de las necesidades estratégicas del sector". Asimismo, entre sus objetivos también está "facilitar el desarrollo en campos como la innovación, el acceso o la sostenibilidad de la industria farmacéutica".
Esta hoja de ruta para el sector de la industria farmacéutica planteaba medidas como la mejora de la fiscalidad de los medicamentos, el impulso del I+D, de las exportaciones y de la digitalización. El Ministerio de Industria había sido el actor protagonista de esta agenda, junto a Farmaindustria.
En concreto, hace referencia a la regulación económica; la transformación digital del sistema sanitario; medidas para la coordinación y cohesión del mismo; medidas para impulsar la I+D+i, las exportaciones, el desarrollo industrial y la prevención de medicamentos falsificados; y medidas para favorecer el desarrollo de la biotecnología y apoyar la investigación clínica.
El Ministerio que dirige Reyes Maroto trasladó su contenido al Ministerio de Sanidad para que pudiera hacer las aportaciones que considerasen necesarias. Pero irrumpió la pandemia de covid en ese momento y quedó paralizado.
Fuente: Redacción Médica