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Un farmacéutico.
El gasto público en sanidad no ha parado de crecer en lo que va de año, a pesar de que el país ha superado la fase más dura de la pandemia de Covid-19 e incluso ha cambiado el método de vigilancia de la enfermedad. La inversión de las administraciones para adquirir productos farmacéuticos y sanitarios ha alcanzado los 11.544 millones de euros en el acumulado de mayo, lo que representa un 5,2 por ciento por encima del mismo periodo del año anterior.
Los datos publicados por el Ministerio de Hacienda revelan la continuidad de una tendencia al alza que ha venido repitiéndose durante los últimos siete años en los que se ha registrado la serie histórica. El gasto público farmacéutico es ahora un 37 por ciento más elevado que en mayo de 2015 cuando la factura representaba 8.376 millones de euros.
El resultado actual especialmente condicionado por la factura dedicada para productos que han sido dispensados mediante receta médica, que han superado los 5.431 millones de euros. Son 356 millones más que el desembolso realizado entre los meses de enero y mayo de 2021, lo que representa un aumento del 7 por ciento.
También ha crecido con fuerza el dinero destinado a cubrir el gasto farmacéutico hospitalario que ha alcanzado los 3.505 millones de euros en lo que va de año (5,7 por ciento más). Mientras que el incremento de la inversión en productos que no cuentan con receta médica ni orden de dispensación ha sido más moderada: 2.607 millones (0,9 por ciento más).
El informe publicado por el departamento de María Jesús Montero muestra que el grueso del gasto ha correspondido a la cuenta de las comunidades autónomas que son las que tienen las competencias en materia sanitaria. Entre todas, han dispuesto 11.327 millones de euros. Por otro lado, el Estado se ha hecho cargo de 217 millones para sufragar gastos de las diferentes mutualidades o de las instituciones penitenciarias en materia sanitaria.
El mapa del gasto público sanitario por autonomías muestra una realidad muy desigual en lo que va de año. La región que más ha elevado su factura ha sido Madrid que ha concentrado una inversión de 1.524 millones de euros, lo que representa un incremento del 13,9 por ciento en comparación con los cinco primeros meses de 2021. Le sigue de cerca Navarra con un desembolso de 164 millones. Es un 11,7 por ciento más en términos interanuales.
También han crecido por encima de la media nacional comunidades como Asturias con una partida total de 301 millones de euros (9,4 por ciento más), Murcia que ha concentrado 419 millones de euros (7,6 por ciento más) o la Comunidad Valenciana que ha llegado hasta los 1.311 millones (6,9 por ciento más).
En el otro lado de la balanza se encuentra Castilla-La Mancha que se ha convertido en el único territorio con una evolución negativa en gasto sanitario. La región que preside Emiliano García Page invirtió un 7,1 por ciento menos en productos farmacéuticos y sanitarios hasta mayo, con una factura que se quedó en 448 millones de euros.
Fuente: Redacción Médica
