Facebook ha elegido las oficinas más emblemáticas de Barcelona para montar un centro operativo desde el que combatir y borrar el contenido nocivo de la red social como las noticias falsas. La compañía californiana abrirá en los próximos meses este punto neurálgico en la icónica Torre Glòries, diseñada por el arquitecto Jean Nouvel, y anteriormente conocida como Torre Agbar.
Hace apenas 10 días se conocía que una empresa llamada Competence Call Center (CCC) había alquilado 9.000 metros cuadrados en ocho plantas de ese emblemático edificio en las puertas del distrito 22@. Dicha compañía ya había abierto otro centro de control de contenidos en Alemania para Facebook, un modelo que replicará ahora en Barcelona. Fuentes sectoriales confirman que CCC trabajará para la red social desde la Torre Glòries. Por su parte, la firma estadounidense ha declinado hacer comentarios sobre esta noticia.
En esas ocho plantas se instalarán 500 personas de CCC, un número prácticamente idéntico al que tienen en la instalación germana de esa compañía en Essen para Facebook, del que los medios internacionales adelantaron el pasado verano que su plantilla se dedicaría a eliminar contenido nocivo de la red social. Se desconoce si el centro de Barcelona asumirá las funciones del de Alemania u operará con los mismos cometidos.
La llegada del proveedor de Facebook viene a paliar la fracasada implantación de la Agencia Europea del Medicamento en la Torre Glòries, ya que la UE eligió Ámsterdam como ciudad para albergar la sede de la institución tras tener que abandonar Londres por el bréxit.
El propietario del inmueble es la socimi Merlin Properties, la mayor inmobiliaria de España, que ha estado ayudado en la comercialización por Savills Aguirre Newman y CBRE. En el caso de CCC, para esta operación se ha asesorado por la consultora Engel & Völkers. Actualmente en la torre se están concluyendo las reformas ya que ha estado desocupada desde la salida de la Sociedad General Aguas de Barcelona (Agbar), su anterior propietario.
CCC, un holding con sede central en Viena y presente en nueve países europeos, ya ha comenzado a reclutar al equipo de 500 personas para Barcelona. En la propia web de la compañía se muestra una treintena de los perfiles demandados, gran parte de ellos como community manager (gestor de redes sociales) con idiomas como francés, italiano, danés, alemán, holandés, noruego, sueco, portugués tanto de Portugal como de Brasil y español en todas las variantes latinoamericanas. De ello, se puede deducir que el centro tendrá competencias internacionales.
La red social apuesta por centros como el de Essen —y en el futuro el de la capital catalana— para impulsar su estrategia de control de los contenidos, una exigencia que se ha avivado tras el escándalo de Cambridge Analytica, que ha llevado al fundador y consejero delegado Marck Zuckerberg ante el Congreso de EE UU, después de conocerse que esta empresa había utilizado de forma ilegal los datos de 87 millones de usuarios de la red social para ayudar presuntamente a la candidatura presidencial de Donald Trump. Facebook quiere frenar la desconfianza generada entre los usuarios y los legisladores, descontentos no solo con la política de privacidad de la compañía sino por otras crisis previas como la relacionada con las fake news y los bots rusos.
“Ahora tenemos unas 15.000 personas trabajando en seguridad y revisión de contenido, y tendremos 20.000 al final de este año. (...) Quiero dejar claro cuál es nuestra prioridad: Es más importante proteger a nuestra comunidad que maximizar nuestras ganancias”, señaló Zuckerberg el mes pasado ante senadores y miembros de la cámara de representantes. El fundador de la compañía también reconoció que Facebook reaccionó “de forma lenta” ante la supuesta injerencia rusa en la campaña presidencial de EE UU de 2016 y ante la avalancha de fake news.
En Essen, por ejemplo, Facebook elimina comentarios, vídeos o fotos que se saltan la política de normas de la red social. La empresa californiana con sede en Menlo Park ha reiterado en los últimos meses su intención de eliminar contenido nocivo, elaborado desde cuantas falsas, además de spam, mensajes que inciten al odio o que puedan suponer apología del terrorismo.
La firma también ha rediseñado las herramientas para gestionar la privacidad de los datos los usuarios, que podrán borrar cualquier contenido de su biografía o perfil que ya no quieran que esté en la red social. En este contexto, Facebook se está preparando también para dar respuesta a la nueva normativa europea sobre privacidad de datos, que entrará en vigor el próximo 25 de mayo.
Dueños. Merlin adquirió el edificio en enero a la Sociedad General Aguas de Barcelona por 142 millones de euros en 2017. Anteriormente otros inversores aseguraron que querían comprar el inmueble para abrir allí un hotel de lujo, pero nunca se concretó la operación, por lo que la torre ha estado vacía por más de tres años.
Reforma. La inmobiliaria está acometiendo una remodelación del edificio. Como novedad, la torre dispondrá de un observatorio en las últimas plantas, que será operado por otra empresa, y sumará dos restaurantes, uno en la planta 15 y otro en la planta 25.
Edificio. Fue diseñado por Jean Nouvel. El rascacielos, uno de los símbolos de Barcelona situado a la entrada del distrito 22@, fue inaugurada en 2005. Se eleva 142 metros y dispone una superficie bruta de 37.614 m2, distribuida en 34 plantas y en un auditorio para más de 350 personas.
Mercado. El inmueble se ubica en la Avenida Diagonal, a las puertas del 22@, la zona más de moda de Barcelona para que las empresas abran sus oficinas. Se espera que las rentas que CCC pague por el alquiler del espacio sean de las más caras de la ciudad y que puedan superar los 20 euros por metro cuadrado al mes.
Fuente: Cinco Días