El Ministerio de Fomento continúa con el calendario previsto por el que después de haber aprobado el reparto de fondos que contempla el Plan de Vivienda 2018-2021, debe firmar con cada comunidad autónoma los objetivos del programa. O dicho de otra manera, tendrá que concretar con cada Gobierno autonómico en qué tipo de actuaciones prevé gastar el dinero que les transferirá el Estado. Fomento estima realizar en torno a 550.000 actuaciones.
Finalmente, y contra todo pronóstico el plan que arranca ahora incluirá una ayuda a la compra de vivienda que no ha dejado indiferente a nadie. Primero, en la primavera de 2017, se anunció como una subvención directa de hasta 10.800 euros con un límite del 20% del precio de adquisición de la casa (que debería ser inferior a 100.000 euros) para jóvenes menores de 35 años cuyos ingresos anuales no superaran las tres veces el Iprem (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), unos 22.550 euros brutos.
Después, cuando fue aprobado por el Consejo de Ministros en marzo pasado, se matizó que solo los jóvenes residentes en municipios de menos de 5.000 habitantes podrían acogerse a esta singular ayuda. La razón esgrimida ante el cambio de criterio fue que era necesario actuar contra el despoblamiento que ya sufren numerosas áreas del país. Para los promotores y la mayoría de expertos del sector es una medida que apenas va a solucionar el problema de acceso de los jóvenes a una vivienda en propiedad y tampoco va a resultar efectiva para el objetivo que se ha marcado. “Los jóvenes quieren vivir allí donde existen oportunidades laborales, no porque la vivienda les resulte más barata van a decidir quedarse en sus localidades de origen si allí no logran trabajo”, recuerda el secretario general de la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE), Daniel Cuervo.
Coronas metropolitanas
Es más, incluso portales inmobiliarios como Idealista han realizado estudios sobre cuántas casas de la oferta de vivienda actual en venta podrían verse beneficiadas por esta ayuda y los datos son descorazonadores. Partiendo de sus bases de datos, con un volumen total de más de 210.000 viviendas en venta a través de su plataforma, apenas una de cada cuatro, el 23,6% (poco más de 50.000), responde a esos criterios: estar situada en una población de menos de 5.000 habitantes y no costar más de 100.000 euros.
Por provincias, Toledo lidera el ranking de las que cuenta con más viviendas de estas características disponibles, con algo más de 4.000 casas, seguida de la provincia de Valencia, con 3.800 y Cantabria (con más de 2.100). En el conjunto de la provincia de Barcelona en cambio solo habría unos 1.100 inmuebles disponibles, cifra que en la provincia de Madrid se reduce a apenas 950.
En opinión de Fernando Encinar, jefe de Estudios de Idealista, la medida es original, pero es muy probable que solo contribuya a descongestionar levemente las grandes urbes como Madrid y Barcelona. “Solo puede interesar a jóvenes que residan, por ejemplo, en algún municipio de Madrid de menos de 5.000 habitantes a quienes no les importe desplazarse diariamente a la capital para trabajar”, explica.
En cuanto a las ayudas para poder rehabilitar las viviendas que cumplan una serie de condiciones, como haber sido construidas antes de 1996, la Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción (Andimac) estima que, en España, en torno al 54,5% de las casas podría beneficiarse de las nuevas ayudas, que por primera vez se otorgarán para la reforma de los inmuebles de manera individual, y no solo para rehabilitar el edificio completo. Así, se podrían aprovechar de dichas subvenciones unos 13,7 millones de viviendas de los casi 25,12 millones que integran el parque inmobiliario total, asegura esta organización.
Grandes cifras. Los últimos datos de los censos de población y las actualizaciones realizadas por el INE señalan que el parque inmobiliario total en España a finales de 2016 ascendía a 25,12 millones de casas, lo que da como resultado una proporción de 1,3 viviendas por hogar. De ellas, poco más del 70% corresponde a residencias principales, otro 15% son casas secundarias o de vacaciones y en torno al 13% serían inmuebles desocupados o vacíos.
Conservación. Más de la mitad del parque, en concreto el 54%, data de antes de 1980 y de esos inmuebles más antiguos, el 16,21%, unos 2,2 millones de casas, se encuentran en muy mal estado de conservación. Todas ellas podrían beneficiarse de las ayudas del plan de vivienda. Los territorios con mayor proporción de casas a reformar son Ceuta, Melilla, País Vasco, Navarra y Cataluña, según el estudio de Andimac.
Retos. El parque español envejece a un ritmo del 2% anual, lo que unido al envejecimiento de la población obliga a reconfigurar los hogares desde nuevos parámetros de confort y accesibilidad. Por ello, Andimac reclama agilidad y sencillez en la tramitación y concesión de las subvenciones.
Fuente: Cinco Días