Leopoldo López y Antonio Ledezma han vuelto a ser detenidos la madrugada de este martes por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) de Venezuela, según han asegurado familiares y compañeros de los dos dirigentes de la oposición, que se encontraban bajo arresto domiciliario. Lilian Tintori, esposa del exalcalde del municipio caraqueño de Chacao, ha comunicado a través de Twitter que unos agentes "se acaban de llevar a Leopoldo de la casa", a la que había regresado el pasado 8 de julio. "No sabemos dónde está ni a dónde lo llevan. Maduro es responsable si algo le pasa", ha afirmado. "El Sebin se acaba de llevar al alcalde Ledezma", ha detallado, por su parte, el diputado de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) Richard Blanco.
Estas detenciones se producen 24 horas después de la celebración de la votación de la Asamblea Nacional Constituyente impulsada por el presidente Nicolás Maduro y rechazada por las fuerzas opositoras, que no presentaron candidatos. Con esos comicios, el Gobierno venezolano pretende desmantelar el actual Parlamento, controlado por una mayoría crítica con el chavismo, y constituir una nueva Cámara. Al término de la jornada electoral, en la que no participó más del 41% del censo, según los datos oficiales, Maduro amenazó con levantar la inmunidad judicial del fuero parlamentario y con reestructurar la Fiscalía. Ya lo había advertido durante la campaña: esas elecciones iban a ser para el chavismo una oportunidad para cobrar "todas las cuentas".
La justicia venezolana concedió el arresto domiciliario a Leopoldo Lopez después de tres años y medio en prisión hace apenas tres semanas, tras una larga mediación liderada por el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y los exmandatarios Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá). Zapatero había mantenido en los últimos meses tres reuniones con Leopoldo López en la cárcel de Ramo Verde. En dos ocasiones le acompañó la excanciller Delcy Rodríguez y en una se sumó su hermano Jorge Rodríguez, alcalde del municipio Libertador de Caracas, dos figuras prominentes del régimen. La posibilidad de aplicar la medida de casa por cárcel se reactivó a principios de abril, poco después de que el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela decidiera dejar sin competencias al Parlamento.
Maduro buscaba entonces un balón de oxígeno ante la creciente presión social. Ahora, después unas elecciones marcadas la violencia —hubo una docena de muertos desde la noche del sábado—, el oficialismo quiere optar por imponer su autoridad. Mientras, las fuerzas de la oposición y sus dirigentes, que ayer rebajaron la tensión de las protestas, promete resistir y asegura que el Parlamento elegido en 2015 seguirá funcionando. Los últimos intentos de diálogo fracasaron y el propio Maduro cargó contra Zapatero después de que este pidiera, en vísperas de la votación, "nuevos gestos" para reactivar un camino al entendimiento. "Sacó un comunicado de manera inconsulta, no consultó al Gobierno soberano de Venezuela sobre el comunicado que sacó, informando de asuntos que hasta el día de hoy habíamos considerado necesario mantener en resguardo", dijo el sucesor de Hugo Chávez.
Ledezma, exregidor del municipio Libertador de Caracas, fue detenido en febrero de 2015 y permaneció cuatro meses en la cárcel hasta que, en mayo de ese año, pasó a arresto domiciliario. Las acusaciones que el régimen dirige a los dos dirigentes opositores tienen que ver con la instigación a la protesta. Leopoldo Lopez fue detenido en 2014 por encabezar las movilizaciones que derivaron en los disturbios del primer semestre de ese año. A Ledezma le imputaron delitos "contra la paz, la seguridad y la Constitución".
Fuente: El País