El roaming en la Unión Europea toca a su fin esta semana. El próximo jueves 15 de junio es la fecha establecida por la Comisión Europea (CE) para poner fin a estas tarifas móviles de itinerancia, que paga el cliente cuando utiliza su teléfono en un país diferente al que lo contrató. Se pondrá fin a una década de reducciones progresivas de los precios en las citadas tarifas de itinerancia.
Este movimiento supondrá un seísmo para un mercado como el roaming en la Unión Europea que, según las estimaciones de la consultora Syniverse, está valorado en cerca de 4.800 millones de euros. Otras fuentes del mercado señalan que, en su conjunto, las operadoras europeas podrían perder cerca entre el 2% y el 5% de sus ingresos.
A su vez, ETNO, la patronal de las telecos advirtió que entre 2015 y 2020, la reducción de los precios del roaming tendría un impacto de 7.000 millones de euros en el cash flow de las operadoras europeas. La Comisión Europea calcula que el fin de las tarifas de roaming costará cerca de 1.200 millones de euros a las telecos, mientras que el regulador BEREC señala que este mercado mueve en torno a 4.700 millones de euros.
En esta línea, la consultora Juniper Research apuntó que el mercado global del roaming, que en 2017 moverá un total de 52.000 millones de dólares (cerca de 46.400 millones de euros) en todo el mundo, registrará una caída del 7%. En el caso del Viejo Continente, la bajada será del 28%, por la eliminación de estas tarifas de itinerancia entre los países miembros de la UE. Estos analistas creen, no obstante, que los ingresos por roaming volverán a crecer a medio plazo, por el descenso de los precios en llamadas y datos, dado que al eliminarse las barreras entre países, se producirá un significativo incremento del uso de estos servicios por parte de los clientes.
En cualquier caso, la eliminación del roaming va a penalizar tanto los ingresos como el ebitda de las operadoras, que en muchos casos han publicado el volumen del impacto.
Vodafone reconoció hace pocos días que el fin del roaming en Europa tendrá un impacto negativo en sus ingresos y ebitda del ejercicio en curso de 300 millones de euros. En el caso del ebitda, supone más de un 2,1% del total. En el año anterior, cuando ya habían entrado en vigor otros descensos del roaming ya decretados por las autoridades europeas o bien adelantados por la propia empresa en muchas de sus tarifas móviles de contrato, el impacto en las cuentas del grupo Vodafone fue de 150 millones de euros. En el último ejercicio, los ingresos por servicios de Vodafone aumentaron un 1,9%, si bien, de excluir el impacto regulatorio del roaming y las tarifas de terminación, habrían subido un 2,7%.
Telefónica, por su parte, adelantó en sus previsiones para 2017 que sus ingresos se mantendrían estables con respecto a 2016, indicando que el impacto negativo de la regulación, especialmente por el fin del roaming, sería de 1,2 puntos porcentuales.
En el caso de Deutsche Telekom, la empresa reconoce que el fin del roaming en el Viejo Continente afectará a sus cuentas en 2017. Entre las previsiones lanzadas al mercado, el grupo germano destaca que sus ingresos por servicios aumentarán un 1%, sin incluir estas tarifas en itinerancia. En el primer trimestre, el grupo alemán registró una bajada de ingresos en el negocio móvil del 0,8% si bien, en términos subyacentes, al incluir la nueva regulación del roaming, el volumen de negocio habría aumentado un 1,4%.
En 2016, las reducciones progresivas de las tarifas de roaming así como su inclusión en distintas ofertas comerciales tuvieron un impacto de 77 millones de euros en los ingresos de Deutsche Telekom.
La británica BT, por su parte, también incluyó la eliminación de las tarifas de roaming en el conjunto de impactos regulatorios que van a afectar a sus cuentas durante el ejercicio en curso. En su última presentación con inversores, la operadora británica precisó que el impacto será de “medias decenas de millones de libras”.
Orange reconoció que los ingresos por servicios móviles ya se vieron impactados durante 2016 por las reducciones de las tarifas de roaming en Francia y otros mercados europeos.
También la holandesa KPN reconoció ante la comunidad financiera que el roaming penalizará sus cuentas en este ejercicio. En la presentación de las previsiones para 2017, la operadora señaló que el ebitda ajustado para este año estará en línea con el alcanzado en 2016, incluyendo un impacto entre 40 y 50 millones de euros por la nueva regulación del roaming.
A su vez, Telia señaló que en 2016 empezó a adaptar la nueva normativa comunitaria relacionada con el roaming. La empresa escandinava reconoció que los volúmenes de ingresos procedentes de estas tarifas de itinerancia se verán afectados, precisando que esta regulación tendrá un pequeño impacto sobre su ebitda en 2017. En esta línea, Telenor reconoció que la reducción del roaming ya penalizó durante 2016 a sus operaciones en países como Noruega, Suecia y Hungría.
A lo largo de los últimos tiempos, los directivos del sector han reclamado medidas a las autoridades comunitarias para compensar la caída de los ingresos provocada por el cambio en la regulación del roaming. En febrero, en el último Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, los consejeros delegados de Orange y Vodafone, Stephane Richard y Vittorio Colao, coincidieron en que la Comisión Europea tendría que forzar una reducción de los costes por la compra de espectro y facilitar nuevas fusiones.
En su opinión, las autoridades europeas no tienen en cuenta los problemas que las operadoras deben encarar para mantener el ritmo inversor en el despliegue de las tecnologías de nueva generación, tanto de fibra óptica como de móvil 4G, así como el futuro 5G.
Colao dijo que se celebra el fin del roaming, pero nadie explica cómo las telecos van a sustituir esos ingresos. El consejero delegado de Vodafone pidió que Europa adopte un modelo similar al establecido en EEUU, donde las operadoras pueden adquirir frecuencias del espectro a perpetuidad, en lugar de una concesión limitada a un número determinado de años como sucede en los países del Viejo Continente.
Otra de las opciones que manejas las telecos pasaría por un aumento de precios en otros segmentos del negocio para compensar esta pérdida de ingresos. En España, las grandes compañías han introducido aumentos de precios en distintas áreas desde 2015, si bien tampoco se puede demostrar que estén relacionadas con el roaming. Las telecos defienden que estas subidas vienen tras más de un lustro de caídas de ingresos como consecuencia del hundimiento de los precios generado por las imparables guerras de tarifas.
De igual forma, insisten en que en los últimos tiempos han acometido fuertes inversiones en el despliegue de las redes de nueva generación, entre las que figuran las infraestructuras de fibra óptica y de telefonía móvil 4G. Estas inversiones, en su opinión, son necesarias para hacer frente al crecimiento del tráfico de datos, que en la última década se ha multiplicado con la aparición de los smartphones y de aplicaciones como WhatsApp, Facebook... y ahora con el fin del roaming, su uso seguirá creciendo entre turistas y personas que viajan a otros países europeos.
Las operadoras españolas van a aplicar el roaming desde el 15 de junio, e incluso lo han extendido a otros mercados más allá de los países integrantes de la Unión Europea, donde entra en vigor la nueva normativa. Y es que los clientes que utilicen su teléfono móvil para hacer llamadas o navegar por internet en otros países fuera de l_UE tendrán que afrontar el coste que establezca su operador. Entre ellas destaca Vodafone, que ya ofrece roaming gratis en Estados Unidos, Islandia, Liechtenstein, Noruega, Suiza, Albania y Turquía. La empresa ofrece 4G en roaming en 116 destinos. Vodafone fue la primera operadora en incluir el roaming en distintas tarifas convergentes, rango que ha ido aumentando progresivamente, desde 2015,
A su vez, Movistar y Orange ofrecerán roaming gratis en Noruega, Islandia y Liechtenstein, además de los países integrantes de la propia Unión Europea. MásMóvil, matriz de Yoigo, también va a adaptar sus tarifas móviles a la nueva normativa de cara a su entrada en vigor el próximo 15 de junio.
En términos de uso, no será necesario darse de alta en el roaming. Por defecto, todos los usuarios de telefonía móvil de contrato de cualquier país miembro de la Unión Europea se beneficiarán del fin de las tarifas de itinerancia a partir del 15 de junio. Algunas operadoras han decidido también extender estos beneficios tarifarios a los clientes de prepago.
La Comisión Europea ha tardado más de 10 años para llegar a un acuerdo con las empresas del sector para la renovación de esta regulación, y se ha visto obligado a retrasar la fecha del fin del roaming hasta en tres ocasiones. Desde 2007, no obstante, los precios de las llamadas y mensajes SMS han caído un 90%, por un 96% de las tarifas de datos. El tráfico de datos en itinerancia se ha multiplicado por 100 en ese periodo.
Fuente: Cinco Días