Farmaindustria negocia con el Ministerio de Industria algunos cambios en la renovación del Plan Profarma, un sistema que contempla exenciones fiscales según el grado de contribución de las compañías al Producto Interior Bruto de España. El objetivo de La patronal de la industria farmacéutica es aumentar los cauces por los que se pueden acceder a estas ayudas para que aumente las inversiones de las empresas, tanto nacionales como multinacionales.
Entre las demandas de Farmaindustria destacan la inclusión de incentivos por crear centros tecnológicos en España, por el diseño y la elaboración de ensayos clínicos o por la contratación extranjera de fabricación en el territorio nacional. Además, la patronal también quiere que las firmas que produzcan los medicamentos calificados de estratégicos por la Agencia del Medicamento tengan también una ayuda extra por parte del Gobierno.
Los cambios perseguidos para el Profarma facilitará que las compañías multinacionales puedan acceder también a las ayudas a pesar de que su presencia física en España sea menor. Proyectos como el hub que AstraZeneca ha instalado en Cataluña o la contratación que hizo Moderna para que Rovi fabricase la vacuna del Covid tendría premio para las multinacionales.
Sin embargo, el tiempo juega en contra para que la negociación llegue a buen puerto. El Plan Profarma caduca el 31 de diciembre y necesita de una renovación para continuar vigente. El problema radica en que este sistema debe ser aprobado por la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, y ésta mueve proyectos a cuentagotas en un periodo de interinidad del Ejecutivo. Con todo, desde la patronal afirman a este medio que harán todo lo que esté en su mano para que un programa con una historia de más de cuarenta años no caiga en saco roto el año que viene.
El Plan Profarma prevé descuentos sobre la aportación al Sistema Nacional de Salud que tienen que hacer por ley las compañías farmacéuticas. En síntesis, las firmas deben pagar el 2% de su facturación cuatrimestral siempre y cuando superen un umbral mínimo de ventas (3 millones de euros). La aportación correspondiente al año 2022 fue de 165 millones de euros, según datos de Farmaindustria.
Según la calificación que se obtenga dentro del plan (Excelente, Muy Buena, Buena o Aceptable), se concede un porcentaje de descuento sobre los pagos mencionados (de un máximo del 25% a un mínimo del 5%). En la última convocatoria, resuelta en el mes de julio, las compañías que obtuvieron el mayor descuento fueron Rovi, Grifols, Almirall, PharmaMar, Insud Pharma, Salvat, Lilly y Bayer. En la última categoría se encontraron firmas como AstraZeneca, Merck, Roche, Bristol Myers Squibb, Teva o Cinfa.
Fuente: El Economista