El juez José de la Mata ha enviado a prisión incondicional y sin fianza a Jordi Pujol Ferrusola cinco años después de que EL MUNDO destapara el escándalo y tras constatar que ha evadido al extranjero 30 millones de euros en plena investigación judicial. El instructor del caso Pujol basa su decisión en los últimos informes policiales que, tal y como desveló este periódico, alertaban de que el primogénito del clan catalán ha aprovechado que ha estado cuatro años sin medidas cautelares para poner gran parte del patrimonio familiar fuera del alcance de la Justicia y para seguir en contacto con sus testaferros en todo el mundo.
El juez José de la Mata considera en el auto de prisión de Jordi Pujol Ferrusola que han quedado acreditados «patrones de comportamiento, pautas de actuación, instrumentos y herramientas empleados para generar, ocultar y blanquear activos» en plena investigación y que sólo su encarcelamiento puede contribuir a evitar esta operativa [lea en PDF el auto de prisión].
El magistrado recuerda que el primogénito del clan catalán «es titular de varias sociedades instrumentales que no producen valor real añadido alguno y cuya única utilización ha sido canalizar capitales de presunto origen criminal para realizar inversiones y gastos en España y en el extranjero».
Reitera De la Mata por enésima vez que «estas sociedades facturaron -indiciariamente- más de once millones de euros supuestamente por tareas de asesoramiento a un conjunto de empresas que tienen como denominador común que, en su mayor parte, su cifra de negocios principal proviene de la explotación de concursos, proyectos y licitaciones con el sector público, especialmente de tipo urbanístico».
«En ningún caso se ha aportado el más leve indicio que justifique de ninguno de los trabajos de asesoramiento para los que se simuló la contratación de Jordi Pujol Ferrusola», expone el juez.
Tras subrayar la principal fuente de ingresos de Pujol Jr., De la Mata indica que «desde que comenzaron las investigaciones en torno a su persona ha venido realizando un progresivo proceso de ocultación de información y evidencias y de descapitalización de todos los activos patrimoniales y financieros que se le podían atribuir». «Esta estrategia», agrega el instructor del caso Pujol, «se ha prolongado hasta el día de hoy».
En este sentido hace referencia a los últimos informes aportados por la Policía Judicial, revelados durante las últimas semanas por EL MUNDO. Según De la Mata, «exponen sistemáticamente la estrategia de despatrimonialización y de ocultación de bienes que Jordi Pujol Ferrusola ha ido desarrollando durante los últimos años».
En esta operativa el magistrado distingue, de una parte, «los negocios jurídicos en los que ha habido una ficción íntegra de los mismos, que serían inexistentes en el fondo». «Simulando su existencia con el único objetivo de simular la actividad para sacar capitales de España con las subsiguientes dificultades para su rastreo y bloqueo posterior». En este tipo de operaciones destaca, entre otras, una «donación ficticia» realizada a su hija o la «simulación civil de escisión patrimonial del investigado y su ex esposa Mercé Gironés».
En segundo lugar, resalta la «constatación de la existencia de activos patrimoniales en el exterior, ostentados a través de sus sociedades instrumentales» y que, «asociados con inversiones reales [...] tendrían su génesis en capitales de origen desconocido que se mantienen intencionalmente fuera de España con la intención de mantenerlos ocultos a la Hacienda pública española».
«De acuerdo con la estimación policial el importe mínimo de capital que Jordi Pujol Ferrusola mantendría fuera de España asciende a unos 30 millones de euros», enfatiza el auto judicial.
De manera paralela explica que Pujol Jr. «continúa manteniendo relaciones directas y continuas con distintos testaferros y/o fiduciarios en otros países (México, Estados Unidos, Argentina y otros». Por lo que «el investigado continúa su estrategia de ocultación dificultando aún más la investigación».
A pesar de que el primogénito del clan ya disponía desde hace un año de medidas cautelares como el bloqueo de sus cuentas, De la Mata ha considerado «necesario y proporcionado» acordar la prisión incondicional y sin fianza para «evitar la ocultación, alteración o destrucción de las fuentes de prueba relevantes». Toda vez que «se ha materializado el peligro fundado y concreto de la ocultación de fuentes de prueba que ya se apreció en febrero de 2016».
Asimismo justifica su decisión arguyendo que esta medida impide «el riesgo de reiteración delictiva, que se ha concretado en las actividades desarrolladas por Jordi Pujol Ferrusola durante esta última fase del proceso».
Fuente: El Mundo