Vista del exterior de una oficina de empleo en Madrid. JAVIER LIZÓN (EFE)
Después de un mes de enero garrafal para el empleo, febrero ha experimentado cierta recuperación del mercado de trabajo, contabilizándose 88.918 cotizantes más a la Seguridad Social en términos medios (y una cifra similar, 81.808 en términos desestacionalizados). Con ello, el ritmo de creación de empleo también se recupera ligeramente hasta el 2,42% y el número total de afiliados sube a 20.170.142, lo que supone 475.870 más que hace un año, según las cifras publicadas hoy por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Esta reactivación ha llegado, sobre todo, de la mano de las contrataciones en los sectores de educación, que nuevamente encabeza la creación de empleo con 26.798 nuevos afiliados --la conversión de temporales en fijos y fijos discontinuos en el sector provoca, en parte, este dinamismo--; y hostelería, que prosiguió en febrero su recuperación, con 25.073 nuevos trabajadores. La industria y la administración pública, que ganaron del orden de 12.000 cotizantes cada uno, también registraron un buen comportamiento. Y todos estos sectores sirvieron para contrarrestar la destrucción de empleo en la sanidad, que perdió unos 10.000 afiliados; y el comercio, que tras la campaña de rebajas, recortó su empleo en 11.871 trabajadores.
Desde el Ministerio de Seguridad Social recurren a la nueva contabilidad quincenal desestacionalizada para explicar este mayor dinamismo del empleo en febrero, ya que el incremento de casi 82.000 cotizantes (desestacionalizados) el mes pasado fue notablemente superior a la variación promedio de los tres meses anteriores, en los que el incremento medio fue de 23.713 trabajadores.
Sin embargo, el paro registrado subió el mes pasado muy levemente, anotando 2.618 desempleados más. Si bien este aumento se debió a la fuerte incorporación a la búsqueda de empleo de 10.139 personas que no tenían un trabajo anteriormente. De hecho, el desempleo en los tres sectores principales de la economía (servicios, industria y construcción) se redujo en casi 9.000 personas y en la agricultura subió en 1.130 parados.
El mes pasado también se mantuvo la buena tónica en la calidad de la contratación. Como es habitual desde la reforma laboral, el número general de contratos siguió descendiendo por la menor firma de contratos temporales. En concreto, en febrero se registraron 1.084 contratos, un 10% menos que el mes anterior. De este total, casi medio millón fueron contratos indefinidos (355.479 fijos ordinarios y 137.721 fijos discontinuos).
Por su parte, desde la Seguridad Social también destacan estas mejoras en la calidad de la contratación, al resaltar que en febrero, el porcentaje de afiliados con contrato temporal se ha reducido hasta alcanzar el mínimo histórico del 14% de los afiliados (antes de la reforma laboral la media era del 30%). Es más, en el caso de los menores de 30 años, la temporalidad ha retrocedido 30 puntos, del 53% al 22%. En conjunto, ahora hay 2,5 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021, el último mes antes de la entrada en vigor de la reforma.
Además, el departamento que dirige José Luis Escrivá ha calculado que la mitad de las personas que tenían un contrato temporal entre enero y marzo de 2022 y que siguen en alta en la Seguridad Social (más de 4 millones de ocupados) han pasado a tener un contrato indefinido. En concreto, de esos 4 millones, el 53% son indefinidos: la mayoría indefinidos ordinarios (1.736.966) y 407.688 fijos discontinuos.
En cuanto al reparto territorial del empleo, la afiliación media subió el mes pasado en todas las comunidades, destacando los incrementos del 2,6% en Baleares y el 0,7% en Cataluña. Mientras que en términos absolutas, esta última comunidad lideró las ganancias de ocupados, con 25.603 más; seguida de Baleares (11.792) y Madrid (11.690). En comparación antes de la pandemia todas las regiones se anotan aumentos de su ocupación.
Fuente: Cinco Días