La actualización de la Ley de Garantías y Uso Racional del Medicamento va a abrir una nueva etapa en el sector farmacéutico español. Lo más duro del Covid-19 impulsó la necesidad de mejorar la industria farmacéutica, lo que, unido a las reivindicaciones de ésta sobre poner en marcha mecanismos para potenciar el acceso a fármacos innovadores y/o modernizar los vigentes, ha hecho que sea una de las grandes esperanzas para este año. Su gran incógnita es cuándo va a ser aprobada.
De momento, no hay una fecha concreta en el horizonte, ya que está en 'pañales' y aún no está elaborado el texto. Si bien, el compromiso del Ministerio de Sanidad "es tener la ley aprobada en diciembre de 2023", según ha señalado el departamento que lidera Carolina Darias a Redacción Médica.
Una fecha que coincide con lo que marca el Componente 18 del Plan de Transformación, Recuperación y Resiliencia del Gobierno de Pedro Sánchez. Cabe recordar que este apartado, entre otras medidas, se compromete a la reforma de la regulación de medicamentos y productos sanitarios "introduciendo elementos que incrementen la competencia y favorezcan el acceso a nuevos tratamientos, desarrollando a su vez el Plan Estratégico de la Industria Farmacéutica".
Y es que la modificación de la Ley de Garantías tiene entre sus grandes retos hacer que el sector farmacéutico sea más fuerte y menos dependiente de terceros países, algo que quedó muy patente tras las situaciones de estrés vividas durante la peor parte de la pandemia del Covid-19. Una misión que también es la misma de Europa, y de ahí la puesta en marcha la nueva Estrategia Farmacéutica Europea.
Una de las novedades que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) baraja incluir en la nueva ley es dar facilidades a los medicamentos de alta necesidad, por lo que la normativa abre la puerta a incentivos a compañías que los fabriquen y quieran traerlos a España.
Además de los medicamentos de alta necesidad, es decir, aquellos que no están autorizados a ser comercializados en España pero que se consideran imprescindibles para el tratamiento de una población específica o pacientes concretos, la Aemps también apuesta por beneficiar a los medicamentos estratégicos, algo que se puso de manifiesto desde que pasó lo peor de la pandemia de Covid-19, donde quedó patente la excesiva dependidencia de terceros países, como China e India.
"En la ley (de Garantías) va a haber una definición de lo que es un medicamento estratégico y, a partir de ahí, poder tomar medidas que hagan que estos fármacos puedan servir al Sistema Nacional de Salud sin que existan problemas de suministro", señaló en una entrevista con este medio el jefe de departamento de Medicamentos de Uso Humano de la Aemps, Antonio Blázquez.
A ellos se suman ahora los medicamentos para los que existe una clara necesidad de autorización de comercialización. De hecho, recientemente la Agencia los identificó en un listado, primer paso para unos posiibles beneficios a las compañías fabricantes.
Fuente: Redacción Médica