Imagen de una tienda de alimentación.
El INE ha confirmado la moderación del IPC en el mes de noviembre hasta el 6,8% adelantada hace dos semanas, un descenso de cinco puntos en la variación interanual de los precios que deja la inflación en el nivel más bajo en 10 meses. Los datos arrojan una bajada de precios en términos mensuales. Si bien los alimentos siguen siendo los protagonistas absolutos del IPC en este otoño de 2022, la bajada de la luz no solo modera la inflación interanual, sino que también permite que los precios bajen respecto al mes pasado.
El descenso del coste de la energía respecto a un noviembre de 2021 donde el precio del megavatio estaba disparado (115 euros este año frente a 193 el anterior en el mercado mayorista Omie) es el principal responsable del enfriamiento de la tensión en los precios. La luz (el INE solo contabiliza la tarifa regulada) ha bajado de hecho un 22,4% en un año. El apartado de vivienda resta 16 décimas al IPC y es la partida que más ayuda al control de los precios, aunque en tasa interanual sube el 1% a causa del efecto de otros suministros del hogar como el gas natural, que sube el 10%, o el butano y propano, un 15%.
Por el contrario, los alimentos apenas en su escalada, aunque al menos han dejado de acelerarse. El precio de alimentos y bebidas alcohólicas sube un 15,3% sobre noviembre de 2021. Es una décima menos desde el máximo marcado el mes pasado, el registro más alto en la serie histórica del IPC. El azúcar se acelera y sube un 50% sobre el año pasado, la mantequilla se mantiene en el 37,5% y la harina un 37,6%. De las 50 categorías del IPC que más suben (todas por encima del 13%), 42 corresponden a productos del supermercado.
En cuanto a los carburantes, la gasolina apenas varía en términos interanuales, pero el gasóleo crece a un ritmo del 18,9%. Es inferior, en todo caso, al marcado el mes pasado, un 24,3%, lo que permite que el apartado de transportes reste 15 décimas al IPC pese a que, en agregado, se encarece un 7,7% sobre 2021. Con todo, la mayor subida dentro del IPC la marcan los combustibles líquidos (excluyendo "otros aceites comestibles"), que se disparan un 58,9% (un 66% el mes pasado).
Eliminando estas categorías de alimentos y combustibles, el IPC subyacente queda en el 6,3%, El INE, asimismo, ha confirmado el dato de IPC subyacente el 6,3%, una décima más que el mes anterior. El IPC armonizado queda en el 6,7% frente al 10% de la eurozona, ampliando el diferencial con la eurozona hasta los 3,3 puntos. Y el IPC a impuestos constantes, que excluye las medidas fiscales como la rebaja del IVA a la luz o al gas, está en el 7,3%. Es decir, el impacto de las rebajas fiscales resta medio punto a la cesta de la compra media.
Fuente: Cinco Días