Personas mayores. (Foto. Xunta de Galicia)
La alta esperanza de vida que registra España, que le ubica desde hace años entre los países del mundo con una población más envejecida, puede entenderse como un éxito del Sistema Nacional de Salud (SNS) por la atención proporcionada. Sin embargo, también se dan otro tipo de circunstancias que invitan a preocuparse de su sostenibilidad y de la calidad con la que viven estas personas sus últimos años.
La señal de alerta la ha dado la Oficina Europea de Estadística (Eurostat). En un reciente informe, ha detallado cómo varias comunidades autónomas españolas se sitúan entre las regiones europeas con una edad media más alta. Es el caso de Asturias, cuya población en 2021 registró una media de 50,3 años, y Castilla y León, con una media de 49,5. Estas dos, tan solo se sitúan por detrás de tres regiones alemanas y de una italiana.
Asturias y Castilla y León serán las regiones más envejecidas de toda la Unión Europea a partir de 2030 y, sobre todo, en el periodo entre 2040 y 2050
No obstante, la proyección para las próximas décadas no es nada esperanzadora. Según este informe, Asturias y Castilla y León serán las regiones más envejecidas de toda la Unión Europea a partir de 2030 y, sobre todo, entre 2040 y 2050. En este periodo, la edad media podría alcanzar los 59,1 años en Asturias, los 57,9 en Castilla y León o los 56,8 años en Galicia. Mientras, la región más joven sería Cataluña (47,2).
Proyección de Eurostat de la población con mayor edad en la Unión Europea (Foto Eurostat)
Ante estas estadísticas, ConSalud.es ha debatido con dos profesionales sanitarios sobre las causas que han llevado a España a esta situación y sobre las medidas que se pueden llevar a cabo para tratar de revertirlo. Para ello, hablamos con el Dr. Jesús Santianes, coordinador nacional de Cronicidad y Dependencia de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), y la Dra. Montserrat Chimeno, vicepresidenta segunda de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI).
BAJA NATALIDAD Y ÉXODO LABORAL
Comenzando por las razones que motivan estos datos, el Dr. Santianes, señala dos parámetros. Por un lado el médico o sanitario, referido al aumento de la esperanza de vida debido a la “disminución de la mortalidad asociada a patologías que antes la causaban” por el desarrollo de nuevos tratamientos. Y, por otro, al ámbito demográfico, con territorios con “las tasas de natalidad más bajas del país” y con un porcentaje “alto” de éxodo laboral hacia regiones “con más empleo”.
Dr. Santianes (Semergen): "El 80% de la actividad de un centro de salud de Atención Primaria tendrá relación con la cronicidad y el envejecimiento; será el 70-75% del gasto sanitario global"
El también médico del área de Gestión Clínica de Urgencias del Hospital Universitario Central de Asturias destaca que aunque la mayor longevidad es “un éxito” también se convierte en “un reto” para el sistema al representar la mayor parte de la actividad asistencial. Según un estudio de Wagner, de finales de 2019, “en torno al 80% de la actividad diaria en un centro de salud de Atención Primaria va a tener relación con la cronicidad y el envejecimiento”. Igualmente, “un 40% de las visitas de urgencias hospitalarias se deberán a descompensaciones o agudizaciones de enfermedades crónicas y representarán un 60% de los ingresos hospitalarios”. Con todo, el 70-75% del gasto sanitario global estará relacionado con ello.
En la misma línea se ha expresado la Dra. Chimeno. A su juicio, el informe de Eurostat viene a corroborar “un hecho que ya estábamos percibiendo” como es el enjevecimiento poblacional y la pirámide invertida. En cuanto a factores, ha resaltado la falta de natalidad, especialmente en regiones como Castilla y León, que hacen que la edad media incremente, y también a la problemática de la España Vaciada, por el que “la gente joven sin muchos recursos laborales se va a otras regiones o al extranjero”.
La Dra. Montserrat Chimeno (SEMI) y el Dr. Jesús Santianes (Semergen). (Fotografias cedidas)
Así, también ha señalado el “reto” que va a suponer y ya lo está haciendo “para la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud” ya que el envejecimiento y la cronicidad que sufre en mayor grado la población mayor “gasta más recursos sanitarios”. Asimismo, ha destacado la importancia de “prever” que van a seguir emergiendo patologías nuevas y agudas, sobre todo infecciosas” que también van a terminar afectando a las personas de más edad.
ATENCIÓN INTEGRAL, EDUCACIÓN Y PREVENCIÓN
Pasando al capítulo de las soluciones, el representante de Semergen ha mencionado dos especialmente. Por un lado, ha expuesto que “una de las intervenciones que resulta más costo-eficiente en pacientes crónicos” es la “educación sanitaria”. El objetivo sería “que el paciente, junto a su familia y el entorno, sean capaces de controlar la enfermedad en una fase estable, que lleve a evitar una visita a urgencias o un ingreso hospitalario”.
La Dra. Chimeno (SEMI) apunta a fidelizar a la población joven en la España Vaciada, potenciar la atención a domicilio o reforzar la salud medioambiental y la coordinación sociosanitaria
Por otro lado, el Dr. Jesús Santianes ha planteado un “abordaje integral del paciente” con la creación de la figura del “gestor de la enfermedad” que sea desarrollada por un médico de familia para “evitar duplicidades en la realización de pruebas o de tratamientos” y que la comunicación entre especialistas sea más fluida. No obstante, ha advertido que esta propuesta se encuentra con el “impedimento” actual de la “falta de recursos humanos y de materiales” para realizar dicha integración y que se eviten “gastos innecesarios”.
Mientras, la vicepresidenta segunda de la SEMI, pone el foco en otras cuestiones. Reclama, por ejemplo, que se fidelice a la población en sus territorios “para que se rejuvenezca y crezca” mediante “más inversión, motivación y creación de empleo”. Además, apunta como posible solución que se potencien nuevas formas de asistencia como la atención u hospitalización a domicilio, “para evitar, siempre que se pueda, que vayan a los hospitales y las urgencias”.
Asimismo, la Dra. Montserrat Chimeno apunta a alcanzar una “adecuada coordinación sociosanitaria”, que se controlen los “agentes externos que afectan a nuestra vida” como los relacionados con la salud medioambiental y que se controlen el resto de factores de riesgo, potenciando “la prevención y los cuidados”. En cualquier caso, ha urgido a “intervenir” y a impulsar “acciones concretas”, aventurando que aunque no se pueda revertir el escenario del todo “si no hacemos nada, la previsión puede ser peor”.
Fuente: ConSalud.es