Restricciones por comunidades. Henar de Pedro
Tras tres meses de subida de la incidencia acumulada de contagios de coronavirus hasta niveles nunca antes visto durante la pandemia, este indicador comienza a descender en España, y algunas comunidades han empezado ya a relajar limitaciones. Inició, con timidez, Cataluña al levantar el toque de queda nocturno impuesto antes de Navidad la semana pasada y ahora levanta casi todas las restricciones. Otras comunidades caminan en la misma dirección, como Galicia y La Rioja, que acaban con la mayoría de las medidas, y Cantabria y Asturias, que renuncian a prorrogar la vigencia del certificado COVID.
No obstante, hay regiones que mantienen las restricciones vigentes ante el miedo de que vuelvan a desbocarse los contagios, Aragón, Canarias y Navarra, la más castigada por la pandemia en esta sexta ola. Por el contrario, otras ya eliminaron todas las limitaciones hace meses, como Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura.
En este sentido, avanzan otros países europeos, como Reino Unido, donde Boris Johnson anunció este miércoles su intención de terminar con casi todas las restricciones para convivir con el coronavirus como con la gripe. La estela del premier británico la siguió solo un día después el Gobierno francés, que también acabará con la mayoría de las limitaciones a partir de febrero. En la jornada consecutiva, fue el Ejecutivo irlandés el que comunicó el fin de buena parte de las medidas en vigor.
La única restricción activa actualmente en Andalucía, la comunidad con menor incidencia, es la obligatoriedad del pasaporte COVID o prueba diagnóstica negativa para el acceso a locales de hostelería y ocio y para entrar a los centros sanitarios y sociosanitarios residenciales, después de que su Tribunal Superior de Justicia acordase la semana pasada prorrogar esta medida hasta el 31 de enero.
La Junta solicitará al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) la prórroga de quince días para la exigencia del certificado COVID para acceder a estos recintos y mantener la eliminación de las restricciones, tanto de horarios como de aforos, previstas en los niveles 1 y 2 de alerta, unos niveles en los que se encuentra la comunidad.
En Aragón, una de las comunidades más castigadas por el coronavirus durante esta sexta ola, el pasaporte COVID es obligatorio para mayores de 12 años en establecimientos de ocio nocturno, celebraciones, centros hospitalarios y de servicios sociales especializados y eventos de cualquier naturaleza que reúnan a más de quinientos asistentes en un lugar cerrado o mil en espacios abiertos, después de que el Tribunal Superior de Justicia haya decidido desestimar su uso en locales cerrados, como cerrados como los gimnasios, el cine o el teatro.
Además, los establecimientos de hostelería y restauración deberán cerrar a medianoche y los locales de ocio nocturno tendrán que hacerlo a las dos de la madrugada, como tarde. Asimismo, cada mesa podrá ser ocupada por un máximo de diez personas en exteriores e interiores.
Las medidas extraordinarias del cierre del interior de los locales de ocio nocturno y la exigencia del certificado COVID, aprobadas el 24 de diciembre para frenar el aumento de los contagios, decaen este jueves, al finalizar el plazo de vigencia establecido inicialmente, tal y como anunció la Consejería de Salud del Gobierno asturiano hace una semana.
Los bares y restaurantes de Asturias podrán volver a mantener su actividad dentro del horario fijado en su licencia, mientras que los establecimientos de ocio nocturno, tras un mes cerrados, podrán reabrir y usar las barras, siempre que se mantenga una distancia de seguridad de 1,5 metros entre grupos de convivencia estable que no superen las diez personas. Estas medidas serán aprobadas este viernes por el Consejo de Gobierno y suponen una modificación respecto a las anunciadas la pasada semana por la Consejería de Salud.
En la misma línea que Andalucía, Baleares se ha decantado por eliminar todas las restricciones contra la pandemia, salvo la vigencia del pasaporte COVID. Actualmente, es necesario para acceder a bares, restaurantes, discotecas, centros de mayores, cines, gimnasios, salas de juego, establecimientos turísticos con habitaciones compartidas y eventos deportivos.
Canarias solicita el certificado COVID obligatorio para acceder a centros sanitarios y sociosanitarios, gimnasios, establecimientos de hostelería y restauración, ocio nocturno y actividades recreativas con aforos superior a 30 personas, entre otros, en las islas en nivel 3 y 4. Esto supone que se aplica en todas, salvo en La Gomera. En los estadios anteriores es voluntario para funcionar con menos restricciones.
En las islas en nivel 4 (Tenerife, Gran Canaria y La Palma), los bares, los restaurantes y los locales de ocio nocturno deben cerrar a medianoche y cuentan con un aforo del 75% al aire libre y del 33% en interiores, con mesas de hasta 6 personas. En las de nivel 3 (El Hierro, Fuerteventura y Lanzarote), pueden abrir hasta la una, con la misma capacidad en exteriores, del 40% a cubierto e igual máximo de comensales. En las de nivel 2 (La Gomera), la clausura será a las dos y también cambia el aforo dentro (50%) y el tope de individuos por mesa (8).
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias anunció este lunes la prórroga hasta el 24 de febrero de las restricciones sobre horarios de cierre de establecimientos, aforos y desplazamientos en el nivel 4 de alerta por la pandemia, que habían sido moduladas el 7 de enero.
El miércoles de la semana pasada, el pasaporte COVID dejó de ser obligatorio en Cantabria para acceder a los locales donde se consume bebida o comida, tras la decisión de la Consejería de Sanidad de no solicitar la prórroga de esta medida, que ha estado vigente durante 40 días. Lo anunció el director general de Salud Pública, Reinhard Wallman, que explicó que la alta contagiosidad de ómicron, incluso entre vacunados, hace que esta restricción resulte ineficaz y no tenga sentido.
No obstante, siguen en vigor otras medidas, como la limitación de aforos en hostelería, cines, teatros y espectáculos culturales y del número de personas por mesa (10 en terrazas y 6 o 10 según la localidad). Además, el ocio nocturno está cerrado en los municipios con peores cifras epidemiológicas.
Castilla-La Mancha no cuenta en estos momentos con restricciones a causa de la pandemia, salvo algunas medidas en las residencias y centros de mayores. Además, el Gobierno autonómico no ve "necesario" introducir la exigencia del pasaporte COVID.
La Junta ha descartado implantar el pasaporte COVID después de analizar un informe de los expertos con "serias controversias" y dudas sobre su efectividad. Tampoco rige ninguna restricción de aforos y horarios, salvo en los centros de mayores y las aplicables a los colegios.
La Generalitat de Cataluña levantará en la madrugada del jueves 27 al viernes 28 de enero la mayor parte de las restricciones vigentes en la comunidad para frenar los contagios de la sexta ola de coronavirus, gran parte de las cuales se aprobaron el pasado 24 de diciembre de cara a la Navidad. El Ejecutivo regional ha tomado esta decisión al considerar que la comunidad se halla en un "altiplano" y en fase de desaceleración.
Tras eliminar el pasado 21 de enero el toque de queda implantado antes de las fiestas, el Govern ha optado por mantener solo el cierre del ocio nocturno. Así, desaparecen las limitaciones en las reuniones sociales, los aforos y la obligatoriedad de presentar el certificado COVID para acceder al interior de bares y restaurantes, gimnasios o residencias de ancianos.
La Comunidad Valenciana mantendrá a partir del próximo lunes la obligatoriedad del certificado COVID en espacios hosteleros y de ocio con aforo superior a 50 personas y para ello ha pedido de nuevo el aval del Tribunal Superior de Justicia. La medida se aplica desde el pasado 4 de diciembre y los jueces ya dieron el visto bueno a su aplicación hasta final de este mes al considerar que la medida estaba justificada por los datos de evolución de la pandemia.
Así lo ha anunciado este jueves el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig. Al margen del certificado COVID, continúan activas otras medidas, como el uso obligatorio de la mascarilla en espacios cerrados y al aire libre, el máximo de diez personas por mesa en bares, restaurantes y cafeterías, así como el límite de aforo en estadios de fútbol (75%) y pabellones de baloncesto (50%).
El Ejecutivo extremeño no ve necesario actualmente implantar el pasaporte COVID, aunque no descarta estudiarlo según el ritmo de inoculación de las terceras dosis. Asimismo, el Gobierno regional ya eliminó el resto de las restricciones horarias y de aforo en todo tipo de establecimientos a finales de septiembre.
Galicia eliminará el próximo viernes por la noche el toque de queda para las reuniones nocturnas, recuperará el uso de las barras y ampliará el horario de la hostelería, así como del ocio nocturno, al vigente antes de Navidad, tras superar el pico de la sexta ola de la pandemia. No obstante, mantendrá la obligatoriedad de presentar el certificado COVID para entrar en estos locales y otras actividades, como hospitales, espectáculos culturales, gimnasios y centros deportivos o albergues turísticos.
Los locales de hostelería podrán abrir hasta la una de la madrugada entre semana y hasta la 1.30 el fin de semana. Además, las mesas en el exterior podrán ser de hasta 15 comensales, en lugar de los 10 de ahora, mientras que en el interior el máximo se mantiene en 8. En cuanto al ocio nocturno, podrá abrir hasta las cuatro de la mañana entre semana y hasta las cinco los fines de semana.
La Rioja ha decidido eliminar la mayor parte de las restricciones impuestas para evitar la propagación del coronavirus, en especial la limitación de horarios de hostelería y ocio nocturno a partir de la madrugada del 31 de enero al 1 de febrero, aunque mantendrá la obligatoriedad del pasaporte COVID hasta el 14 de febrero.
Desde el 28 de diciembre los locales de hostelería debían cerrar a la una de la madrugada y, ahora, recuperarán su horario normal. El certificado COVID será necesario en bares, restaurantes, discotecas, locales turísticos, espacios multifuncionales, gimnasios e instalaciones en las que se desarrollen actividades físico-deportivas dirigidas en espacios cerrados.
Por el momento, la Comunidad de Madrid no considera necesario adoptar el certificado COVID, aunque las autoridades regionales están "vigilantes" ante la evolución de la pandemia.
Además, los comercios, oficinas cines y teatros cuentan con el 100% de su aforo permitido antes de la pandemia, una medida que se aplica también a centros comerciales, cines, teatros y auditorios. Es el mismo vigente para las terrazas de bares y restaurantes, aunque el porcentaje baja al 75% para los interiores. En cuanto a los horarios, hostelería y ocio nocturno pueden abrir igual que antes de la pandemia.
En Murcia es obligatorio presentar el certificado COVID, una PCR o un test rápido de antígenos de las últimas 72 horas para entrar en discotecas y locales de ocio nocturno. En bares y restaurantes será voluntario para ampliar hasta el 75% el aforo interior.
Además, la actividad no esencial debe cerrar, como tarde, a la una de la madrugada y los restaurantes y bares en los que no se exija el certificado COVID tendrán un aforo en interiores del 30% de su capacidad y del 100% en terrazas. A cubierto, el máximo de personas por mesa será 10 y en exteriores, 12.
El Gobierno de Navarra acordó este miércoles prorrogar hasta el próximo 14 de febrero las restricciones actualmente en vigor frente a la COVID-19, como el cierre de locales entre las 1 y las 6 horas y la obligación del consumo sentado en mesas para un máximo de 10 personas, que expiraban el 31 de enero. Además, mantiene la necesidad de presentar el pasaporte COVID en determinados espacios cerrados. El Ejecutivo toma esta decisión, a pesar de que la comunidad lleva varias semanas con la incidencia acumulada a la baja tras haber sido la más castigada por esta sexta ola.
Originalmente, el País Vasco exigía el pasaporte COVID para acceder al ocio nocturno y a los restaurantes con aforo para más de 50 personas tras el aval del Tribunal Supremo, pero el 15 de diciembre lo extendió a todos los establecimientos hosteleros, conciertos, gimnasios, recintos deportivos cerrados, hospitales, residencias y prisiones.
Las autoridades aplican también otras restricciones, como el horario máximo de cierre para todas las actividades comerciales, sociales y culturales a la una de la madrugada. Además, existe una limitación de aforos del 60% en todo tipo de establecimientos y recintos interiores y no puede haber más de diez personas por mesa.
Euskadi previsiblemente mantendrá a partir de mañana las restricciones vigentes contra la pandemia y buscará en los tribunales que se amplíe hasta el 13 de febrero la exigencia del certificado COVID en toda la hostelería, eventos, gimnasios, hospitales, residencias o prisiones y se ampliará a hoteles, alojamientos turísticos y salones de juego. La decisión debe ser avalada por el Tribunal Superior de Justicia de la comunidad.
Fuente: 20 Minutos