Los parlamentarios británicos han reanudado hoy con normalidad sus actividades tras el intento de asalto ayer a sus instalaciones, que se saldó con la muerte por el momento de cuatro personas, una de ellas el propio atacante.
La primera ministra Theresa May, en una declaración en la Cámara de los Comunes, no ha desvelado la identidad exacta del terrorista, pero ha dicho que nació en Reino Unido y que hace años fue investigado por el MI5 (servicios de inteligencia) por su supuesta conexión con actividades violentas extremistas. Sin embargo, según May, en los últimos tiempos había dejado de estar en el radar de las fuerzas de seguridad y no había ningún indicio o sospecha sobre sus planes de ataque al Palacio de Wesminster.
Aunque la primera ministra indicó que el atacante actuó solo al atropellar a varios peatones en el Puente de Westminster y acuchillar luego a un policía en la entrada del Parlamento, antes de ser abatido a tiros, confirmó que se han producido ocho arrestos de personas posiblemente relacionadas con el incidente en Londres y Birmingham.
En su intervención, May señaló que entre los heridos hay personas británicas, francesas, estadounidenses, rumanas y griegas, entre otras nacionalidades.
"Ayer, un acto de terrorismo intentó silenciar nuestra democracia pero hoy nos reunimos como de costumbre", afirmó May ante una abarrotada Cámara de los Comunes. "No tenemos miedo y no nos doblegaremos ante el terrorismo".
La jefa del Gobierno ensalzó a Keith Palmer, el polícía asesinado por el atacante. Otras dos personas murieron atropelladas en el Puente de Westminster. Una de ellas es Aysha Frade, una profesora de instituto en Londres de madre española.
Fuente: Expansión