El Parlamento Europeo ha acordado la suspensión temporal de la licencias de las vacunas contra la COVID-19. Apenas cuatro semanas después de que Estados Unidos diera el pistoletazo de salida anunciando su apoyo a la suspensión de patentes de las vacunas, la UE se abrió a debatir.
Este jueves, el debate y votación han llegado a su final en la Eurocámara, quien ha acordado por 355 votos a favor, 263 en contra y 71 abstenciones, abrir negociaciones para la suspensión temporal de patentes en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC). La decisión ha sido respaldada por el PSOE, mientras que el Partido Popular y Ciudadanos se han mostrado mayoritariamente en contra.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha asegurado que la propiedad intelectual debe protegerse porque “es la idea detrás del descubrimiento y mantiene los incentivos para la innovación en investigación y desarrollo”. A pesar de ello, considera que las licencias voluntarias “son la manera más efectiva para facilitar el aumento de la producción”. Pero, ha apuntado que, en caso de que estas licencias voluntarias fracasan, la concesión de licencias obligatorias “debe ser y es la herramienta legítima para aumentar la producción”.
De esta manera, Von der Leyen ha explicado que, junto a OMC, lo que pretende es aclarar y simplificar el uso de licencias obligatorias en tiempos de emergencia global.
“La producción de vacunas requiere muchos conocimientos técnicos. Por lo tanto, los procesos biológicos son muy complicados”, ha indicado Von der Leyen. Se necesitan conocimientos técnicos, tecnología, personal cualificado e infraestructura. Y no todos los países disponen de estas herramientas ni tienen la misma capacidad de producción.
Por eso, la presidenta de la Comisión considera que para lograr una mejora de la transferencia tecnológica es fundamental la colaboración y, “si es necesario, la concesión de licencias obligatorias”. “La patente no cuenta toda la historia; una patente explica parte del proceso de producción”, ha declarado.
“Pero necesita tener más cuando se trata de este tipo de productos complejos. Por eso, Europa puso en marcha la iniciativa en la OMC, para simplificar las licencias obligatorias. Y esta también es la razón por la que Europa se comprometió con 1.000 millones de euros para crear con nuestros socios africanos y con la industria tres centros de fabricación diferentes en África”, ha añadido Von der Leyen.
Las vacunas y el acceso equitativo y justo a las mismas a nivel mundial son temas que han copado todos estos meses la actualidad de la Eurocámara. “Por eso que Mario Draghi y yo convocamos la Cumbre de Salud Global del G20. Por un lado, se trataba de las lecciones aprendidas, pero por otro lado, también se trataba de compromisos concretos“, ha señalado Von der Leyen.
Así, los líderes de los Estados miembro, en la Declaración de Roma del G20, se comprometieron a impulsar la capacidad de producción en los países de medianos y bajos ingresos. Además, otro tema que abordaron fue la importancia de acabar con los “cuellos de botella” en las cadenas de suministro. “Aún no hemos llegado a esto, pero la Declaración de Roma fue la primera vez que hubo un compromiso al respecto”, ha apuntado la presidenta de la Comisión.
Para Von der Leyen, el tema más acuciante a corto plazo es el suministro de vacunas en los países de medianos y bajos ingresos. En este sentido, define tres pilares:
Fuente: El Global