BRUSELAS PIDE QUE EL LUNES SE REABRAN LAS FRONTERAS INTERIORES DE LA UE

Ahora toca abrir fronteras lo antes posible y restablecer la libre circulación de las personas. Es el mensaje que ayer lanzó la Comisión Europea, pidiendo que las fronteras internas de Schengen se levanten el próximo lunes, 15 de junio, y las del exterior de la Unión Europea, gradualmente a partir del 1 de julio.

Sin embargo, no todos van a seguir esta recomendación. No lo hará España, que mantiene para final de mes su obertura de fronteras al resto de países de Schengen, ni tampoco Portugal. Son dos de los países que van a retrasar más el retorno a la libre circulación, a pesar del interés del sector turístico para que se restablezca lo antes posible.

Fronteras exteriores

Se plantea permitir la entrada de viajeros de terceros países a partir del 1 de julio

La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, justificó su demanda al considerar que la situación de control de la pandemia es cada vez mejor en los países de la UE, con datos que convergen y medidas equivalentes para reducir el riesgo de contagio. También añadió que el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) mantiene que el cierre de fronteras internas de Schengen “no es ahora una medida efectiva para controlar la epidemia”.

Sin embargo, España se atendrá a su plan previsto. “Tomaremos las decisiones siempre guiados por el principio de la protección de la salud y la seguridad de las personas”, dijo la vicepresidenta y ministra de Economía, Nadia Calviño, aunque reconoció que el objetivo es recuperar lo antes posible la actividad económica, especialmente en un sector estratégico para España como es el turismo. En definitiva, España juega la carta más conservadora desde el punto de vista epidemiológico y levantará las barreras internas más tarde que la mayoría de sus socios europeos.

En la zona Schengen

La UE mantiene que ahora impedir la libre circulación no es una medida efectiva

Esto por lo que corresponde al movimiento interno dentro de Schengen. El siguiente paso que recomienda Bruselas es levantar las fronteras externas de la Unión Europea, permitiendo a partir del 1 de julio que puedan entrar pasajeros de terceros países, y no solo los que demuestren un motivo esencial, como es el caso desde el 16 de marzo. Será un proceso gradual en función de la situación de los terceros países, y en concreto, dependiendo de su grado de cumplimiento de tres criterios: que su situación epidemiológica respecto al coronavirus sea similar o mejor que la de la Unión Europea, que adopten medidas de contención durante el viaje y que apliquen reciprocidad con los países europeos. Para ello, ayer mismo empezaron los trabajos técnicos para acordar una lista común de terceros países a los ciudadanos de los cuales se les permitirá la entrada.

Avanzándose a otros nombres, la Comisión Europea propone que se incluya en la lista a los países de los Balcanes, como Albania, Bosnia y Herzegovina, Kosovo, Montenegro, Macedonia del Norte y Serbia, porque su situación epidemiológica es similar o mejor y por su estrecha relación con la UE.

Bruselas confía en que los estados miembros serán capaces de consensuar una lista común de países terceros que no suponen un riesgo, una relación que se espera que vaya ampliándose progresivamente a través de revisiones periódicas. Los ciudadanos de estos terceros países tendrán libre acceso a todo el espacio Schengen, porque en la fecha en que ellos verán autorizada su entrada se espera que ya no queden barreras internas entre los 26 países signatarios de este acuerdo. La Comisión también plantea que, desde los terceros países con quienes se mantengan las restricciones de viaje, se permita de todas maneras la entrada de estudiantes y de trabajadores altamente especializados.

Fuente: La Vanguardia