Sesión plenaria del 22 de abril de 2020 (Foto: Congreso de los Diputados)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha logrado este miércoles los apoyos suficientes en el Congreso de los Diputados, con 269 síes, los de los partidos del Gobierno, PSOE y Unidas Podemos; Partido Popular; Ciudadanos; Más País, PNV y el resto de grupos minoritarios, para la autorización de la tercera prórroga del estado de alarma hasta las 00.00 horas del próximo 9 de mayo.
En esta ocasión, Sánchez ha perdido apoyos para esta nueva prórroga, la tercera, del confinamiento. VOX, JxCat y la CUP han votado en contra de alargar el aislamiento, mientras que ERC y Bildu se han abstenido, lo que ha sumado un total de 16 abstenciones y 60 votos en contra.
En sus intervenciones, el presidente Sánchez ha advertido de que los sacrificios personales, sociales y económicos por la pandemia de la Covid-19 y sus efectos “apenas han comenzado” porque, ha reiterado, “la crisis no se acabará mientras la ciencia no encuentre una vacuna”.
Sánchez: “Esta nueva prórroga será la que permitirá empezar a desescalar las reglas de confinamiento”
El presidente del Gobierno ha calificado esta nueva prórroga como “imprescindible” para no bajar la guardia aunque ha considerado que “el punto crítico ha pasado y el sistema de salud ha resistido”. Sánchez ha anunciado que la nueva ampliación para el periodo comprendido entre el 26 de abril y el 9 de mayo, ambos inclusive, “permite ya la posibilidad de introducir nuevas medidas de alivio en el confinamiento” más allá de la decidida sobre permitir los paseos de los menores de 14 años a partir de este domingo acompañados de un adulto. “Esta nueva prórroga será la que permitirá empezar a desescalar las reglas de confinamiento”, ha asegurado.
Sánchez también se ha defendido de las acusaciones que ha recibido sobre la “incertidumbre” que transmite el Gobierno o la “capacidad de respuesta y gestión” que se han puesto en cuestión. Según ha apuntado, “no se puede decir que no hemos tenido la voluntad de no dejar nadie atrás” o de proteger “a los colectivos más perjudicados”.
En todo caso, el presidente del Gobierno ha advertido que “cualquier optimismo debe ir acompañado de la prudencia”, y siguiendo los consejos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los expertos sanitarios y los científicos, “seremos cautelosos y prudentes”. Por ello, ha avanzado que “el confinamiento general no se levantará hasta que no estemos preparados para ello”, insistiendo en que “no vamos a correr ningún riesgo”.
De esta manera, ha adelantado que en las próximas semanas y meses “irán variando los nuevos escenarios”, siempre con los objetivos de “proteger a la ciudadanía y mantener a salvo el SNS para que la desescalada sea gradual y segura”.
DURAS CRÍTICAS POR PARTE DE LA OPOSICIÓN
No obstante, pese a haber logrado los apoyos suficientes para sacar adelante la prolongación del estado de alarma, los partidos de la oposición han sido muy críticos con la gestión de la crisis del coronavirus que está haciendo el Ejecutivo.
El líder del PP, Pablo Casado, ha calificado como un "gran error el retraso de las medidas de confinamiento" por parte del Ejecutivo de Sánchez, alegando que con solo haberlas adelantado una semana se habrían evitado “miles de contagios”.
Casado ha criticado duramente los fallos en la gestión del Gobierno y los errores del Ministerio de Sanidad con la compra de miles de test fallidos o la adquisición de mascarillas defectuosas, culpando al Gobierno del riesgo al que ha expuesto al conjunto de los profesionales sanitarios.
El líder del PP también ha acusado al presidente Sánchez de haber pecado de “incompetencia” y no de “prudencia” en la rectificación de las medidas de alivio del confinamiento de los niños.
Casado ha acusado al presidente Sánchez de haber pecado de “incompetencia” y no de “prudencia” en la medida sobre la salida de los niños
Finalmente, pese a las duras críticas, el líder de los populares ha manifestado su apoyo a la prórroga del confinamiento, pero, no sin antes advertir a Sánchez de que ahora debe ser él quién cumpla con su parte y aproveche esta “confianza” para gobernar al servicio de los españoles.
Por otro lado, la formación liderada por Santiago Abascal, se ha ido desmarcando de su sí a la primera prórroga del estado de alarma con palabras cada vez más gruesas y con acciones más contundentes. VOX ha pasado de pedir la dimisión de todo el Gobierno en bloque a querellarse contra el Ejecutivo por un presunto delito de imprudencia grave con resultado de muerte, lesiones por imprudencia grave y delitos contra los derechos de los trabajadores durante la crisis del coronavirus.
Para la CUP, el Gobierno “utiliza el estado de alarma como pretexto para recortar derechos”. La formación independentista ha tildado de “error” que “se haya relajado el grado de confinamiento y que se permita la actividad no esencial” al considerar que “así se pone en riesgo a miles de trabajadores sin medidas de seguridad”. Además, la CUP ha acusado a Sánchez de “aprovechar la coyuntura para impulsar un proceso de recentralización”.
Esta misma línea ha seguido la portavoz de JxCat, Laura Borrás, que ha achacado la negativa de su grupo parlamentario a la ampliación del estado de alarma al “desacierto” del Gobierno al levantar el confinamiento total, que “tampoco atina ahora con las pautas que va señalando para el camino del desconfinamiento”.
El presidente del Gobierno informó el 14 de marzo de la declaración del Estado de alarma “para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19”. En un primer momento, el Ejecutivo solicitó el apoyo del Congreso para que se prorrogara hasta el 12 de abril, logrando un apoyo mayoritario del conjunto de la cámara. Posteriormente, volvió a solicitar una nueva prórroga hasta el 26 de abril, con respaldo también de los grupos políticos.
Fuente: ConSalud.es