El mes de enero ha terminado con 174.000 puestos de trabajo en España, cifra superior a la de enero del año pasado y que deja el número total de afiliados a la Seguridad Social en 17,67 millones, cifra 3,3% superior a la de enero de 2016. El dato, aun negativo, es positivo si se compara con otros eneros; el primer mes del año es, con gran diferencia, el peor para el empleo: desde 2001 se han destruido, de forma sistemática, al menos 150.000 empleos, llegando a un máximo en enero de 2009: 350.000.
Por sectores, se han destruido muchos empleos en comercio, hostelería y actividades administrativas, en torno a 30.000 en cada uno de estos segmentos, con cifras similares a grandes rasgos a las del año pasado. La industria, eso sí, ha mejorado, pasando de destruir 12.000 puestos de trabajo en 2016 a 5.000 este año; la construcción ha pasado de 19.000 empleos destruidos a 6.500. Educación y transportes también mejoran sustancialmente. El régimen agrario, por su parte, pasa de perder 15.000 empleos a solo 800.
En cuanto al paro registrado, ha aumentado en 57.2570 personas, cifra idéntica a la de 2016 (10 individuos más) y que supone la mejor de la serie histórica que empieza en 1999. En total, hay apuntadas en las oficinas de emplos 3,76 millones de personas, un 1,55% más que en diciembre pero un 9,41% menos que hace 12 meses. En un año el paro registrado ha bajado en 390.00 personas.
El paro ha crecido con mucha más fuerza entre las mujeres que entre los hombres (2,14% frente a 0,8%), y se ha concentrado casi totalmente en los servicios (65.000 parados más en el antiguo Inem). La contratación ha subido un 16,94% sobre el año pasado, con aumentos del 19,5% en los indefinidos. La tasa de temporalidad es del 91,9%, y la cuarta parte del total de los contratos firmados en enero son temporales y a tiempo parcial.
En cuanto a la evolución geográfica, el empleo cae en todas las comunidades autónomas. Cae con menor fuerza en Andalucía gracias al crecimiento del empleo en provincias con un fuerte sector primario, como Jaén o Huelva. Esta comunidad autónoma es donde menos baja la afiliación, un 0,63%. Cantabria, Asturias y Valencia dan peores datos, con caídas ampliamente por encimad el 1%.
Fuente: Cinco Días