Green Book, la cinta dirigida por Peter Farrelly, se ha alzado con el premio a la mejor película del año en la 91ª edición de los Premios Oscar imponiéndose así a la gran favorita: Roma, de Alfonso Cuarón. El filme del cineasta mexicano se llevó tres premios: mejor dirección, mejor fotografía y mejor película de habla no inglesa.
Idéntico botín tuvo Green Book, que se hizo, además de con el premio a la mejor película, con el Oscar al mejor actor de reparto y el Oscar al mejor guion original.
La otra gran triunfadora de la noche fue Bohemian Rhapsody, el biopic de Freddie Mercury, que se llevó cuatro Oscar: al mejor montaje, a la mejor edición de sonido, a la mejor mezcla de sonido y el de mejor actor protagonista para Rami Malek. "Gracias a Queen por permitirme ser una parte minúscula de vuestro eterno legado", dijo el actor que también destacó que, como la de Mercury, la suya es la historia de un inmigrante que intenta abrirse camino en el mundo del arte.
Rami Malek, con el Oscar a mejor actor por 'bohemian Rhapsody'. Foto: Reuters.
Olivia Colman dio una de las grandes sorpresas de la noche al imponerse a Glenn Close como mejor actriz protagonista por su encarnación de la monarca Anna de Inglaterra en La Favorita. El premio a la mejor actriz de reparto fue para Regina King por El blues de Beale Steet que recibió el premio entre lágrimas y agradeciendo el premio a su madre, al resto de las nominadas y a Dios que, aseguró, "siempre es bueno".
El galardón al mejor actor de reparto fue para Mahershala Ali por Green Book. El intérprete, que levanta su segunda estatuilla, quiso dedicar el Oscar a su abuela que siempre fue un "refuerzo positivo". "Ella es la que me ha ido guiando en cada paso de mi camino, sin ella no estaría aquí ahora", aseguró.
Tampoco le fue nada mal a Black Panther, la primera cinta de superhéroes nominada al Oscar a la mejor película que no ganó en la categoría principal, pero que sí que se llevó tres de los siete premios a los que estaba nominada: mejor vestuario, mejor diseño de producción y mejor banda sonora por el trabajo de Ludwig Göransson.
Brian Hayes Currie, Peter Farrelly y Nick Vallelonga se alzaron con el premio al mejor guion original por Green Book mientras que Spike Lee ganó el Oscar al mejor guion adaptado con Infiltrado en el KKKlan. "Las elecciones están a la vuelta de la esquina. Entre el odio y el amor, hagamos lo correcto", afirmó siembre combativo en su discurso.
El premio a la mejor canción fue para Shallow, el tema central del remake de Ha nacido una estrella, filme protagonizado por Lady Gaga y coprotagonizado y dirigido por Bradley Cooper. "No se trata de ganar, la clave es de no abandonar. Si tienes un sueño, lucha por él. Si algo te apasiona, da igual cuantas veces te rechacen o caigas, lo importante es cuantas veces te vuelves a levantar", afirmó la artista visiblemente emocionada.
Antes de aceptar el premio, Gaga cantó con su coprotagonista. En el escenario, no ocultaba las lágrimas. "No hay una sola persona en el planeta que pueda haber cantado esta canción conmigo sino tú. Gracias por creer en nosotros", le dijo a Cooper, quien también dirigió la película, la última remake del clásico de Hollywood de 1937 del mismo nombre.
Otros premiados de la noche fueron Free Solo, que se llevó el galardón al mejor documental; Spider-Man: Un nuevo universo, que se alzó con el premio al mejor filme de animación del año; y Skin, que ganó el Oscar al mejor cortometraje de ficción y dejó sin premio a Madre, el trabajo del español Rodrigo Sorogoyen.
Adam Lambert, acompañado por Brian May y Roger Taylor, fue el encargado de iniciar la ceremonia de los Oscar con un número que incluía dos canciones de Queen: We will rock you y We are the champions, y con una escenografía que mostraba imágenes de Freddie Mercury de fondo.
Las primeras palabras que se escucharon en la gala vinieron de la mano de Maya Rudolph: "Esta noche no hay presentador, no habrá premio de película popular y México no va a pagar el muro", dijo de manera crítica. Y es que esta 91 edición de los premios no contó con presentador, después de que Kevin Hart renunciara por unos tuits antiguos.
Javier Bardem, durante los Oscar. Foto: Reuters
El actor español Javier Bardem protagonizó uno de los momentos más polémicos de la ceremonia al presentar el premio a mejor película de habla no inglesa en español con subtítulos en inglés: "No hay fronteras, no hay muros que frenen el talento. En cada región, en cada continente hay historias que nos conmueven", dijo.
Por otro lado, Rami Malek tuvo que ser atendido por los servicios de emergencia tras caerse al recibir el Oscar al mejor actor por Bohemian Rhapsody.
- Mejor película: Green Book
- Mejor dirección: Alfonso Cuarón por Roma
- Mejor actor protagonista: Rami Malek por Bohemian Rhapsody
- Mejor actriz protagonista: Olivia Colman por La favorita
- Mejor actor de reparto: Mahershala Ali por Green Book
- Mejor actriz de reparto: Regina King por El blues de Beale Street
- Mejor guion original: Peter Farrelly, Brian Currie y Nick Vallelonga por Green Book
- Mejor guion adaptado: Spike Lee, Kevin Willmott, David Rabinowitz y Charlie Wachtel por Infiltrado en el KKKlan
- Mejor película de hablar no inglesa: Roma (México)
- Mejor película de animación: Spider-Man: Un nuevo universo
- Mejor documental: Free Solo
- Mejor fotografía: Alfonso Cuarón por Roma
- Mejor montaje: John Ottman por Bohemian Rhapsody
- Mejor diseño de producción: Hannah Beachler y Jay Hart por Black Panther
- Mejor maquillaje y peluquería: Greg Cannom, Kate Biscoe y Patricia DeHaney por El vicio del poder
- Mejor banda sonora: Ludwig Göransson por Black Panther
- Mejor canción: Shallow, de Ha nacido una estrella
- Mejores efectos visuales: Paul Lambert, Ian Hunter, Tristan Myles y J.D. Schwalm por First Man
- Mejor vestuario: Ruth Carter por Black Panther
- Mejor mezcla de sonido: Paul Massey, Tim Cavagin y John Casali por Bohemian Rhapsody
- Mejor edición de sonido: John Warhurst y Nina Hartstone por Bohemian Rhapsody
- Mejor corto de ficción: Skin
- Mejor documental: Period. End of Sentence
- Mejor corto de animación: Bao
Fuente: El Economista