En la primera fila, de izquierda a derecha: María Jesús Montero, ministra de Hacienda; Dolores Delgado, ministra de Justicia; el presidente de Unidad Editorial, Antonio Fernández-Galiano; el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la directora de EXPANSIÓN, Ana I. Pereda; el presidente de Endesa, Borja Prado; y Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior. En la segunda fila, y también de izquierda a derecha: Manuel Broseta, presidente de Broseta Abogados; el vicepresidente de Unidad Editorial, Giampaolo Zambeletti; Magdalena Valerio, ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social; José Luis Ábalos, ministro de Fomento; Meritxell Batet, ministra de Política Territorial y Función Pública; Nadia Calviño, ministra de Economía y Empresa; y María Luisa Carcedo, ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Todos ellos posan en el Hotel Westin Palace, donde se celebró la cena del Aniversario de EXPANSIÓN.
El presidente avanza que "en las próximas semanas" el Gobierno lanzará un ambicioso "plan de reformas" que se iniciará con un vuelco a la legislación del mercado laboral y afectará también a los sectores financiero y energético.
"El momento de las reformas es ahora". Pedro Sánchez anunció ayer que "en las próximas semanas" el Gobierno que preside presentará un ambicioso plan económico que se iniciará con un vuelco a la legislación del mercado laboral. De las medidas que reveló el jefe del Ejecutivo descollaron "una simplificación drástica del número de contratos, dejándolo en tres (indefinido, temporal y de formación)" y la reducción "sustancial" del número de bonificaciones y deducciones a la contratación, "dejando sólo aquellas que afectan a los colectivos más vulnerables y necesitados".
Ésas fueron la ideas más novedosas de su discurso durante el acto de Aniversario de EXPANSIÓN, que se celebró anoche en el Hotel Westin Palace de Madrid.
"En nuestro país son necesarias transformaciones en cinco grandes ámbitos: la educación, el mercado de trabajo, el debate sobre cómo financiar el Estado del Bienestar, la transición ecológica y una reforma Constitucional que amplíe derechos y cohesione el país", aseguró el presidente, añadiendo que ésos serán los cinco vectores de su nuevo plan, que forma parte de la Agenda del Cambio, un programa de Gobierno destinado a cambiar el modelo económico de España mediante una mayor intervención del poder ejecutivo en "la defensa de la calidad institucional, el fomento de la competencia, la provisión de bienes y servicios y la justicia económica".
Al acto, patrocinado por Endesa y Broseta Abogados, acudió la plana mayor del mundo empresarial, que escuchó con atención el mensaje económico de Sánchez. El presidente quiso tender la mano a los líderes del sector privado, después de algunos desencuentros notables, sobre todo a cuenta de la nueva política económica y fiscal. "Quiero tenderles la mano para que mejoren las reformas en las que trabaja el Gobierno, que colaboren con nosotros en su diseño y en su desarrollo", apuntó Sánchez.
También asistieron ocho miembros del Gobierno: Nadia Calviño, ministra de Economía y Empresa; María Jesús Montero, ministra de Hacienda; José Luis Ábalos, ministro de Fomento; Magdalena Valerio, ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social; Fernando Grande-Marlaska, ministro de Interior; Meritxell Batet, ministra de Política Territorial y Función Pública; Dolores Delgado, ministra de Justicia; y María Luisa Carcedo, ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.
El presidente del PP, Pablo Casado, completó el cuadro de honor de la representación política. A él fue dirigido, veladamente, otro de los mensajes centrales del discurso del presidente. "Nuestra ambición reformista es total, y los Presupuestos son una herramienta importante para llevarla a cabo", pero no "la única". Es decir, en caso de que no se aprueben las Cuentas, el Gobierno seguirá "adelante" con las mismas reformas, "a través de modificaciones presupuestarias". Llegado ese caso, "serán otros los que tendrán que dar las explicaciones", opinó el jefe del Ejecutivo, en referencia a los partidos de la oposición.
Sánchez desgranó, entonces, las principales medidas de su nuevo "plan de reformas". El ámbito en el que más se centró fue el laboral: "Entre otras, vamos a recuperar el valor de la negociación colectiva, reforzar la causalidad de la contratación temporal y recuperar las jubilaciones forzosas por edad".
Además de la reducción del número de contratos a tres y de la eliminación de casi todas las bonificaciones que reciben los empresarios por contratar, la Agenda del Cambio de Sánchez incluye "un plan de choque" por el empleo joven, que se aprobará antes de que acabe el año y pondrá el énfasis en la mejora de las competencias digitales y en lengua extranjera. Ese plan incluirá medidas para incentivar que los jóvenes en el exterior vuelvan a España.
En el ámbito financiero, el presidente del Gobierno hizo hincapié en "el reforzamiento de la arquitectura institucional de los organismos de regulación y supervisión", mediante la creación de una autoridad macroprudencial (Autoridad Nacional de Estabilidad Financiera) y de una Autoridad para la Protección del Cliente Financiero.
Por último, el líder socialista anunció que "la Ley de Cambio Climático y Transición Energética será presentada antes de finalizar el año".
Más allá de su nuevo plan, Sánchez quiso conjurar los temores sobre la desaceleración. "Creo que todos compartimos la solidez de nuestras perspectivas", pero "los ciclos económicos no mueren de viejos, y si así fuera, este ciclo aún es joven", aseveró, antes de opinar que es necesario un "crecimiento inclusivo", porque "en el ascensor social del neoliberalismo nunca hubo sitio para todos".
El presidente de Unidad Editorial, empresa editora de este diario, Antonio Fernández-Galiano, hizo una defensa de los valores editoriales de EXPANSIÓN, que ejerce la crítica siempre "fiel a sus convicciones" y siempre priorizando el crecimiento de la democracia española.
Fernández-Galiano repasó los motivos de inestabilidad política y económica que confluyen actualmente. "Los datos económicos comienzan a mostrar síntomas inquietantes" y generan "inquietudes no deseables", dijo.
A punto de cumplirse el 40 aniversario de la Constitución, a juicio de Fernández-Galiano "no parece que sea el mejor momento para cambiar alegremente las reglas de juego en medio del partido, y mucho menos sin el amplísimo consenso de todos los jugadores". Por ello, exhortó a "profundizar en la fórmula en lugar de cuestionarla".
El presidente de Unidad Editorial consideró "fundamental" que las instituciones públicas "sepan hacer frente" a los populismos y a quienes "juegan la baza nacional cuando cunde el desencanto". Pidió no caer en las "soluciones demagógicas" para "dar soluciones inmediatas al pueblo" y afrontar, en cambio, "los retos que plantea nuestra realidad demográfica", la reducción de la deuda pública y las medidas para "preservar la seguridad del marco regulatorio" y "los necesarios estímulos para el crecimiento y la creación de empleo".
La directora de EXPANSIÓN, Ana I. Pereda, destacó los valores liberales que inspiran la línea editorial del diario, y que se mantienen "inamovibles" más de 30 años después de su fundación. "Defendemos la figura del empresario, del inversor, del directivo, que con su esfuerzo y apuesta inversora crea prosperidad y puestos de trabajo". "Y decimos que es bueno tener beneficios", subrayó, en un momento en el que algunos sectores de la política y de la sociedad civil lo están poniendo en cuestión.
Pese al entorno de desaceleración económica -internacional y doméstica-, y pese a que hay "reformas por hacer", Pereda quiso lanzar "un mensaje positivo". "Con las perspectivas que nos dan más de 30 años de historia económica, vemos que podemos superar momentos de dificultades, desempleo e inestabilidad, pero siempre aplicando grandes dosis de esfuerzo y determinación", remachó.
Fuente: Expansión