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Manuel Franco, Javier Padilla, Jesús Ponce, Natividad Calvente y Pedro Gullón.
El Ministerio de Sanidad ha acogido este martes la presentación del informe “Hacia la equidad en Salud: propuestas para transformar la atención primaria en España”. Este documento, fruto de la colaboración entre un comité multidisciplinar de expertos y Novartis, analiza el estado actual de los servicios de atención primaria desde la perspectiva de los determinantes sociales de la salud.
El informe es uno de los primeros en España que examina las desigualdades en los servicios de atención primaria, especialmente en relación a los grupos sociales más vulnerables. Según los expertos, las enfermedades no transmisibles, como las cardiovasculares, son un área clave en la que se observa un impacto significativo de las desigualdades sociales y económicas. El director general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Pedro Gullón, destacó la relevancia de este análisis, afirmando que “es un paso adelante que estos temas no solo estén en la agenda política de los epidemiólogos, sino también en la agenda de otros responsables políticos, otros ministerios, la sociedad civil y la industria farmacéutica”. Gullón subrayó que el informe marca un momento clave para la acción destinada a reducir las desigualdades sociales y mejorar la equidad en el acceso a la atención sanitaria.
El documento sitúa los determinantes sociales, como el género y la situación socioeconómica, en el centro del análisis de las desigualdades en salud. Estos factores pueden agravar la vulnerabilidad de ciertos grupos poblacionales, especialmente en lo que respecta a enfermedades no transmisibles. Aunque los servicios sanitarios no son la causa principal de estas desigualdades, pueden contribuir a mitigarlas o, por el contrario, amplificarlas. En este sentido, el informe propone fortalecer la Atención Primaria como un pilar fundamental del Sistema Nacional de Salud para reducir las disparidades.
Jesús Ponce, presidente de Novartis España, reiteró el compromiso de la empresa con iniciativas que promuevan la equidad, señalando que “nuestra actividad va más allá de desarrollar tratamientos innovadores. Iniciativas como esta evidencian el firme compromiso que tenemos desde Novartis con los pacientes y la población más vulnerable para actuar como facilitadores clave en el intercambio de conocimiento y en la reflexión para avanzar, entre todos, hacia una mayor equidad en el acceso a la atención primaria”.
El coordinador del informe, Manuel Franco, médico epidemiólogo y profesor de investigación en el Basque Centre for Climate Change Research y en la Johns Hopkins Bloomberg School of Public Health, explicó que el análisis ha identificado cuatro áreas estratégicas de actuación para mejorar la equidad en los servicios de atención primaria. La primera de ellas es mejorar la coordinación sociosanitaria y garantizar un acceso equitativo a los servicios de atención primaria, especialmente en las áreas de mayor vulnerabilidad social. Además, el informe destaca la necesidad de una asignación más equitativa de los recursos sanitarios, subrayando que "es crucial que la atención primaria se consolide como un espacio de promoción de la salud desde una perspectiva comunitaria". Asimismo, se pone énfasis en la prevención de enfermedades no transmisibles, con un enfoque particular en la población vulnerable, que presenta una mayor prevalencia de enfermedades cardiovasculares y sus factores de riesgo.
Durante la jornada, se celebró una mesa redonda moderada por Natividad Calvente, directora de Asuntos Públicos de Novartis España, en la que participaron representantes de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), EAPN España, la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) y la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP). Todos coincidieron en la necesidad de seguir avanzando hacia una atención primaria más equitativa, haciendo hincapié en la importancia de identificar y abordar los factores que contribuyen a la desigualdad en la atención sanitaria.
El informe pone especial énfasis en las enfermedades cardiovasculares, que siguen siendo la principal causa de muerte en España. Los representantes del comité explicaron que las desigualdades sociales y económicas agravan la vulnerabilidad de ciertos grupos de población, limitando su acceso a servicios de prevención y tratamiento. Según los expertos, abordar estas desigualdades desde la atención primaria contribuiría a mejorar significativamente la gestión de estas enfermedades, así como de otras patologías crónicas no transmisibles.
También se celebró una mesa de debate con gestores sanitarios y políticos. Teresa Marín, directora general de Humanización y Atención Sociosanitaria de Castilla-La Mancha destacó los avances logrados en las últimas tres legislaturas, gracias a la estabilidad del gobierno regional, en torno a los pilares estratégicos de humanización de la asistencia, sostenibilidad, profesionales y el cambio de modelo hacia la prevención y la promoción de la salud. Subrayó la importancia de adaptar las políticas sanitarias a la realidad demográfica de la región, marcada por la dispersión de la población, y señaló que aunque se han logrado importantes avances, áreas como la coordinación sociosanitaria aún presentan grandes desafíos.
Por su parte, Oscar Veiras, director general de Salud Pública de Asturias, valoró positivamente las ideas presentadas en el documento, destacando la tradición de participación comunitaria y atención a las desigualdades en la región. Subrayó la creación del Observatorio de Salud como herramienta clave para monitorizar y abordar las inequidades, aunque reconoció que su implementación práctica aún enfrenta retos. Asimismo, resaltó la formación en atención comunitaria para los profesionales y las iniciativas para gestionar los recursos de forma equitativa. También se refirió a la importancia de la coordinación intersectorial y a los desafíos de adaptar los roles profesionales en la atención primaria.
La vicepresidenta Segunda de la Comisión de Sanidad del Congreso y diputada del PP, Elvira Velasco, destacó la importancia del trabajo colaborativo entre actores clave para mejorar la equidad en la atención primaria, resaltando el papel de comités como el liderado por Manuel Franco. Hizo una analogía con los trabajos realizados tras la crisis sanitaria de la covid-19, subrayando la necesidad de una coordinación efectiva entre comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad. Además, mencionó desafíos como la coordinación sociosanitaria, la atención a la cronicidad, y la necesidad de definir un modelo de atención primaria más equitativo y adaptado a las zonas vulnerables. También planteó propuestas para mejorar la asignación de recursos y el papel de diversos profesionales en la atención primaria, insistiendo en la necesidad de financiación adecuada y una mayor implicación política para llevar a cabo estos cambios.
Carmen Martínez, portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad del Congreso, felicitó por el documento y destacó la importancia del proceso deliberativo que llevó a sus conclusiones. Subrayó que la equidad en salud ha sido un objetivo prioritario desde la Ley General de Sanidad de 1986 y destacó avances recientes en leyes y estrategias enfocadas en los determinantes sociales de la salud, como la Estrategia de Salud Pública de 2022. También mencionó el proyecto de ley para consolidar la equidad en el Sistema Nacional de Salud, el plan integral de tabaquismo, y el plan estratégico para reducir la obesidad infantil, entre otras iniciativas.
La jornada concluyó con una intervención de Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad, quien reafirmó el compromiso del Gobierno con la equidad en salud: “La universalidad y la Atención Primaria son grandes promotores de equidad dentro de nuestro sistema sanitario”. Padilla subrayó la importancia de implementar las recomendaciones del informe para garantizar que todos los ciudadanos, independientemente de su situación socioeconómica, tengan acceso a una atención sanitaria de calidad.
Para él, debe quedar claro que la atención primaria “no es solo un lugar donde se prestan servicios, sino una forma de hacer las cosas”. Es un modelo de asistencia accesible, integrada y con orientación comunitaria que coordina distintos niveles asistenciales a lo largo del tiempo. Sin embargo, la atención primaria ocurre en un lugar, y ese contexto geográfico es fundamental para abordar la equidad en salud. Las desigualdades territoriales influyen en las oportunidades de salud, por lo que es crucial territorializar las prácticas sanitarias y adaptar el concepto de comunidad a los desafíos del siglo XXI.
Padilla también señaló que España destaca en Europa por sus buenos resultados en salud, los cuales se deben principalmente “a la universalidad del sistema sanitario y la existencia de una atención primaria bien distribuida”. Estos dos factores, según el secretario de Estado, no solo promueven la salud, sino que también son motores clave de equidad. Además, destacó la baja tasa de necesidades médicas no cubiertas y la escasa diferencia entre los grupos de renta alta y baja demuestran la eficacia de un sistema que protege financieramente a su población, aunque aún queda mucho por mejorar, especialmente en la atención primaria.
Para mantener y mejorar este nivel de equidad, el responsable ministerial explicó que es necesario ajustar los principios originales de la atención primaria a las realidades actuales. Igualmente, según dijo, la accesibilidad no debe confundirse con inmediatez, y la longitudinalidad, es decir, la continuidad de un mismo profesional durante años, sigue siendo vital para mejorar los resultados en salud. El reto es redistribuir la financiación de manera equitativa y garantizar que la atención se centre en los lugares donde más se necesita. Por ello, el nuevo plan de atención primaria y comunitaria del Ministerio buscará avanzar en este sentido, con un “enfoque pragmático y posibilista”, que permita medir su impacto real en la equidad del sistema sanitario.
Fuente: Diario Farma
