LOS PARTIDOS PRESENTAN SUS PROPUESTAS MARCO EN SANIDAD PARA LAS ELECCIONES DEL 28-M

Los partidos políticos comienzan a preparar sus hojas de ruta para las elecciones autonómicas del próximo 28-M en clave sanidad. Prueba de ello son los cada vez más recurrentes mítines y presentaciones en las comunidades en las que se ha agendado cita para la mencionada fecha de concurrencia de comicios. Así las cosas, la mayor parte de las formaciones han presentado sus programas marco, sobre los cuales se dibujarán las especificidades de cada territorio con los intereses concretos para el sector.

El Global ha escudriñado los documentos publicados por PSOE, Partido Popular, Unidas Podemos y Ciudadanos en esta materia. En ellos se adivinan propuestas que pretenden responder a los retos derivados de la COVID-19, que ha convertido a la sanidad en un eje fundamental de los programas regionales.

No en vano, la antesala de las elecciones generales es siempre observada con atención dado que las competencias sanitarias permanecen transferidas a las autonomías; de este modo, salvo las ‘históricas’ —Galicia, País Vasco, Cataluña y Andalucía— y Castilla y León —a razón del adelanto electoral del pasado 2022—, el resto de España elegirá a sus nuevos responsables.

Partido Socialista – PSOE

Pedro Sánchez.

Con el recuerdo de la pandemia —en positivo— como sello para reclamar el voto para sí, el Partido Socialista se compromete con el electorado a partir del refuerzo del valor de lo público, la cogobernanza interterritorial y la “garantía de equidad, universalidad y cohesión social” como una mejora a continuar. En consecuencia, el programa marco se sitúa en sintonía continuista con lo desarrollado estratégicamente por el actual gobierno nacional.

Entre algunos asuntos destacados, la formación aboga por avanzar “en la atención a las enfermedades con mayor impacto en la salud”. En este punto hacen referencia explícita al cáncer, las enfermedades cardiovasculares, crónicas, neurodegenerativas y raras, desarrollando e implementando las estrategias del Sistema Nacional de Salud (SNS).

El PSOE promete también “potenciar la formación continua de los profesionales sanitarios”, pero también progreso en la equidad en el acceso a la atención “ampliando la cartera común de servicios”, una equidad que pretenden también hacer efectiva en el acceso a las prestaciones sanitarias respondiendo al reto demográfico. Además, apuesta por impulsar la creación de ‘data lakes’.

Como retos a atender, el partido apunta en su programa marco a otros asuntos como la salud pública desde una perspectiva ‘one health’ o la mejora de la atención hospitalaria en coordinación con el primer nivel asistencial; la reducción de listas de espera y desarrollo e impulso de la atención primaria; y la implantación de nuevas terapias genómica, calificadas como “desafío” y cuya producción en el SNS “debe ser una prioridad”.

Partido Popular – PP

Alberto Núñez Feijóo.

El Partido Popular encabeza su epígrafe programático de salud enfocando en las necesidades agravadas en los últimos años por la pandemia, manifestando su preocupación por la falta de médicos, especialmente en atención primaria y pediatría. La formación aboga también por continuar garantizando una financiación suficiente a la sanidad como capítulo presupuestario más importante en los presupuestos autonómicos.

Entre algunos aspectos reseñables se incluye la apuesta de la formación por la mejor integración de los recursos y su coordinación, mencionando la especial relevancia que tiene para la asistencia oncológica el trabajo en red para administrar tratamientos “cada vez más especializado” y acumular experiencia. “Este proceso ayudará de forma muy notable al objetivo de implementar cada vez con mayor intensidad planes de medicina personalizada”, valoran.

En otro orden, el PP se compromete a seguir incrementando de forma progresiva la financiación de la atención primaria, hasta alcanzar los estándares propuestos por la OMS; también con la fidelización de profesionales, la mejora de la infraestructura hospitalaria y la incorporación de nueva tecnología, y el “prioritario” desarrollo de terapias de última generación, además de la reducción de lista de espera con criterios de garantía de demora “por prioridad clínica”.

Adicionalmente, el programa popular profundiza en otras áreas de interés como el refuerzo de la humanización de la asistencia, la preparación ante eventuales emergencias sanitarias, la extensión de la digitalización “mediante la telemedicina y la medicina personalizada” y el desarrollo de nuevas medidas en salud mental “como vías rápidas que permitan un diagnóstico y tratamiento precoz”.

Ciudadanos – CS

Patricia Guasp.

El programa marco en sanidad para las elecciones del 28-M de la formación naranja parte de una premisa diagnóstica: el mal funcionamiento del Estado de Bienestar. “Invertiremos y reformaremos para fortalecer nuestra sanidad pública, que volverá a ser orgullo de nuestro país”, comprometen, abundando en que desde el partido impulsarán “las reformas necesarias para que los sistemas de salud no sean arma política y sí el verdadero foco de atención de la inversión pública”.

La hoja de ruta liberal califica, de esta forma, de “paradoja” el funcionamiento del actual sistema, que “no redistribuye hacia quienes tiene que redistribuir, aquellos con menos oportunidades, sufre desequilibrios en las aportaciones de unos y otros territorios”.

Ciudadanos busca así posicionarse como alternativa en los comicios a los partidos que, a su juicio, no ponen solución a las principales preocupaciones ciudadanas; en esta terna la formación menta tres parcelas: empleo, educación y la propia sanidad. Para dentro de este área esgrime una de sus grandes compromisos en salud de la formación: aumentar la cobertura de la sanidad pública para la reproducción asistida.

“Tenemos que acercar a todos los municipios y ciudades de nuestro país servicios sanitarios, asistenciales, tanto a la infancia como a los mayores y cualquier acompañamiento para mejorar la vida de las familias”, defienden, en última instancia.

Unidas Podemos – UP

Ione Belarra.

Las propuestas del partido morado toman como base la promesas de impulsar en el conjunto de los territorios “una financiación sobre el PIB y una ratio de profesionales por habitante equiparables a la media europea”. Como parte de este esfuerzo inversor, abogan también por apoyar económicamente la atención primaria “con el 25 por ciento del total de la financiación de la sanidad pública”.

La contraparte de este aspecto en Podemos la marca su intención de llevar a cabo una “moratoria absoluta en la concesión de nuevos conciertos o de cualquier otra forma de externalización en la sanidad”. Al tiempo se llevarían a cabo, de forma decidida, “procesos de desprivatización de infraestructuras y servicios” en los gobiernos regionales en los que resultara vencedora la formación política. Muy alineada con ello se sitúa la propuesta de creación de farmacéuticas públicas como parte del sistema, pues opinan que “no es en absoluto recomendable no tener la capacidad soberana de producir vacunas y medicamentos en nuestro territorio”. “Una red de farmacéuticas públicas serviría para garantizar esa autonomía”, añaden.

Además, en el programa morado figura el diseño de un plan de choque para recuperar el personal sanitario, el cual consideran “uno de los problemas nucleares de nuestro sistema sanitario”. No en vano, a su juicio se trata de “un problema complejo y desatendido en los últimos años que requiere una intervención decidida en distintos frentes” donde se mencionan varias acciones, como el incremento del presupuesto para la aceleración del programa de estabilización del personal público sanitario.

En última instancia, las intenciones en salud mental de UP también figuran en esta hoja de ruta marco, donde la promesa es la equiparación con la media UE de las ratios por habitante de psiquiatras, psicólogos y enfermeros especializados en los centros de atención primaria. El fin último, asevera, es “transitar hacia un modelo menos invasivo, menos farmacológico, menos institucional y de atención mucho más continua y comunitaria”.

Fuente: El Global