Login details
05/06/2016

Las claves de la crisis de Vueling: sobreexplotación de los recursos y exceso de rutas

La Unión Internacional de Asociaciones de Delegados Médicos, UIADM,
es la Organización que integra a todos los Visitadores Médicos del mundo.
REGÍSTRATE

                                                        

Vueling presenta hoy un plan de contingencia

05/07/2016 09:51

Más de 76.000 pasajeros afectados, casi medio centenar de vuelos suspendidos en cuatro días y un golpe institucional son las consecuencias más visibles del caos que desde el pasado fin de semana afecta a Vueling. El modelo 'low cost' de la aerolínea parece haber llegado a su límite y sus responsables se enfrentan ahora al reto de redefinirlo al tiempo que atajan la mayor crisis a la que se ha enfrentado la compañía hasta ahora.

El origen

El caos comenzó a hacerse evidente el pasado jueves, cuando empezaron las cancelaciones, los retrasos y la indignación de los viajeros. Sin embargo, no fue hasta el fin de semana cuando la situación se desbordó. El sábado se suspendieron una veintena de vuelos y unas 3.000 personas se vieron directamente afectadas. El domingo la situación se repitió y sólo el lunes pareció mejorar respecto a jornadas anteriores, ya que el número de vuelos cancelados se redujo a cinco, cuatro de ellos con origen o destino en Barcelona.

La huelga prevista para hoy en Francia en protesta contra la reforma laboral ha afectado a algunos de los trayectos que la compañía tenía previstos. Vueling anunció ayer la cancelación de 40 vuelos previstos para esta jornada [consulta aquí la lista de vuelos afectados], aunque hasta el momento esta cifra se ha elevado a 64, según ha confirmado a EL MUNDO la propia compañía, que añade que están "trabajando para intentar normalizar la situación".

Las causas

¿Qué motivos han llevado a la compañía hasta aquí? Ésta es una de las incógnitas y la clave para entender el desbordamiento de la aerolínea. En el trasfondo, una idea: sobreexplotación. Muchas voces coinciden en que la empresa ha crecido en los últimos años a costa de llevar al límite los recursos humanos y técnicos para cubrir el aumento de sus rutas. La situación podría haber estallado hace meses, atendiendo a las quejas de los trabajadores y responsables de la empresa.

La jefa de la sección sindical del Sindicato de Tripulantes Auxiliares de Vuelo de Líneas Aéreas (Stavla) en Vueling, Guadalupe Romero, explicó ayer ante los medios que habían advertido de que "el verano sería complejo y que hacía falta sostener más la base de la compañía para tolerar un crecimiento que ha acabado arrollándolo todo".

Romero reiteró que no hay ninguna huelga encubierta de los trabajadores y aseguró que los empleados están "exhaustos" y al límite del agotamiento para tratar de recuperar la normalidad en la operativa.

                                                         

Juan Valdés, presidente del comité de empresa de Vueling, incidió en esta idea la explicar que "los aviones están volando las 24 horas del día y las tripulaciones están en los límites legales. Cuando una pieza falla, se produce un efecto dominó y caen las siguientes", aseguró.

La pieza a la que se refiere Valdés llegó en forma de huelga en Francia el pasado 28 de junio. Según explicaron ayer diversas fuentes de la compañía, entre ellas el director comercial, David García Blancas, el paro en el país vecino originó una "bola de nieve" de retrasos y cancelaciones que la empresa no supo valorar ni gestionar a tiempo.

Dicha huelga obligó a cancelar 56 vuelos en los que viajaban 8.000 personas. La aerolínea fue incapaz de recolocar a esos viajeros y mantener al mismo tiempo su operativa habitual, coincidiendo además con el inicio de las vacaciones de verano y el incremento de actividad propio de estas fechas.

"Le pedimos a Vueling el número de vuelos que ofrecieron el año pasado y los mismos datos este año. Los datos no salen", ha dicho el conseller de Territori de la Generalitat, Josep Rull, esta mañana en una entrevista en la Cadena Ser. "Para garantizar toda la oferta de Vueling se necesitan más refuerzos".

La compañía anunció ayer la contratación de seis aviones adicionales, 34 pilotos y 130 empleados para reforzar la atención al cliente, que se suman a los 600 tripulantes, 400 de cabina y 200 pilotos que contemplaba la planificación de la operativa para este verano.

Sistema A-CDM

Otro de los factores que ha contribuido a agravar los retrasos es el sistema A-CDM que hace un año se implantó en El Prat.

Se trata de un sistema automatizado instalado en casi una veintena de aeropuertos europeos que asigna los horarios de salida del tráfico aéreo. El objetivo es que los tiempos de espera en pista sean lo más corto posibles o incluso nulos y que el impacto de la actividad a nivel medioambiental sea también el más bajo. Si el sistema no optimiza los horarios de salida, afecta a la puntualidad, especialmente en los horarios con picos de vuelos.

Fuentes de la compañía han asegurado a EL MUNDO que el sistema "no ayuda, es una parte del problema" y contribuye a agravar los retrasos. "Es difícil saber la repercusión directa de su aplicación, las demoras son apreciables, pero no se pueden cuantificar porque falta la referencia de cuando no se aplicaba el sistema", aseguran las mismas fuentes.

Todas las aerolíneas se ven afectadas por los retrasos que conlleva su aplicación, pero en el caso de Barcelona, Vueling es la más perjudicada porque el 40% de la operativa de El Prat está en manos de la 'low cost'.

Consecuencias

Costes económicos y crisis de imagen y reputación, son las consecuencias más palpables que esta crisis tendrá sobre Vueling. No hay aún valoraciones al respecto, pero la desconfianza entre potenciales clientes es ya un hecho y las sanciones por parte de organismos oficiales, también.

Desde el ministerio de Fomento se exigió ayer a la compañía presentar este martes un plan de contingencia en el que detalle los medios -aeronaves y tripulación- con los que cuenta para hacer frente a los meses de julio, agosto y septiembre.

El departamento que dirige Ana Pastor también ha abierto un expediente informativo a la aerolínea y la propia ministra advirtió ayer desde Santander de que actuará con toda "la contundencia de la ley" porque "incumplir los derechos de los pasajeros no sale gratis a nadie".

                                                         

También la Generalitat está muy pendiente de los pasos que dé la empresa en estos días. Representantes del Govern catalán se reunieron en la tarde del lunes con la dirección de Vueling, cuya base se sitúa en Barcelona, y establecieron una comisión de seguimiento de la situación que obligará a la aerolínea a comparecer semanalmente ante las autoridades autonómicas.

La administración catalana no descarta imponerle sanciones, si bien por el momento centrará sus esfuerzos en velar porque el caos de Vueling finalice y en recabar el máximo de información sobre lo sucedido.

Qué pueden hacer los viajeros

Además de enfadarse y mostrar su indignación, los viajeros afectados por los retrasos y cancelaciones de Vueling pueden reclamar los derechos que legalmente tienen como pasajeros. Las únicas circunstancias en las que una compañía aérea no tiene obligación legal de proporcionar ningún tipo de compensación es si la cancelación de un vuelo se ha producido debido a razones como una erupción volcánica o condiciones climáticas extremas.

En esta información recogemos de forma detallada qué opciones de reclamación tienen los afectados y cómo deben ser atendidas sus peticiones.

Fuente "El Mundo"

REGÍSTRATE en www.visitamedica.com y disfruta las ofertas exclusivas para nuestro colectivo.
Club Social
Back to news list

NEWSLETTER
If you wish, you can subscribe to our newsletter by entering your email below
FOLLOW US ON
rss twitter linkedin youtube